El director de Proyecto Hombre-Fundación Ángaro en Jaén, Pedro Pedrero, asegura que peligra la continuidad de la organización dada la difícil situación económica por la que atraviesa desde hace años. Tanto es así que asegura que no se descarta poner en marcha un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para “tratar de salvar el futuro y la continuidad de la fundación”.
Pedro Pedrero asegura que en el último año se está dando una paradoja: “mientras que el número de usuarios aumenta como consecuencia de la crisis, las ayudas de las administraciones han descendido un diez por ciento aproximadamente”. No obstante, el director de la Fundación Ángaro hace autocrítica antes de lanzar la primera piedra y considera que el tercer sector es culpable en gran parte de la situación que atraviesan actualmente la mayoría de las ONG, entre ellas Proyecto Hombre, ya que durante muchos años se convirtieron en pequeñas delegaciones de las administraciones. “Hemos sido palmeros de las administraciones durante mucho tiempo”, asegura tajante Pedrero.
En la actualidad, los ingresos de la Fundación Ángaro provienen en un 75 por ciento de las administraciones, principalmente de la Junta de Andalucía, y el resto de las aportaciones de los usuarios, donaciones y convenios con otras entidades.
Pedrero explica también que la falta de pago de las subvenciones provoca que se generen una serie de pagos de intereses con las entidades financieras que terminan de ahogar a la organización y que actualmente suponen el 15 por ciento del presupuesto, que sumado al diez por ciento de descenso de las ayudas, alcanzan un 25 por ciento menos de presupuesto en el momento en que más necesario es. También hace autocrítica en cuanto a la aportación de los patronos de la fundación, ya que asegura que aportan tiempo y trabajo, pero no dinero, por lo que considera que sería necesario replantear la estructura actual de la mayoría de las fundaciones.
En cuanto a la situación del consumo de sustancias y de adicciones, Pedrero destaca un repunte de usuarios en los últimos meses como consecuencia de la crsis. “Nos han llegado muchos casos de alcoholismo y de desestructuraciones que no se veían hace muchos años y que han aflorado ahora, porque la crsis está actuando como catalizador”. Pedrero explica que son personas que tenían el problema latente, pero que al perder los ingresos aflora esa dependencia, incluso se acentúa.
Por otro lado, califica de “alarmante” el inicio del consumo de los jóvenes en el alcohol y otras sustancias. “Actualmente muchos de ellos se inician a los 14 años y con 18 ya presentan los primeros problemas”, añade.
En cuanto al perfil de usuario más frecuente, asegura que es un varón o mujer, indistintamente, con edades comprendidas entre los 30 y los 40 años.
