Cádiz

El pecio hallado en la obra de la terminal de contenedores del Puerto de Cádiz ha sido trasladado con éxito

Es la primera ocasión en España que se realiza una operación de este tipo

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El primer pecio hallado en las obras de construcción de la terminal de contenedores del Puerto de Cádiz ya ha sido trasladado hasta su lugar de destino final, una cota de profundidad de cinco metros, durante una operación realizada este jueves que se prolongó durante toda la jornada, con el viento y la mar en condiciones meteorológicas favorables, culminando con éxito.

   La operación, diseñada y ejecutada en todas sus fases por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC), fue aprobada y supervisada en todo momento por técnicos de la Consejería de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía y del Centro de Arqueología Subacuática, así como por los arqueólogos de Divership Diving, S.L., empresa adjudicataria de los trabajos submarinos, y de TANIT, encargada de la dirección arqueológica.

   Según detalla en un comunicado la APBC, el procedimiento contó con un plan de seguridad para garantizar no sólo el correcto traslado del pecio, sino también la integridad de las personas implicadas en la maniobra, de las que el presidente de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, Rafael Barra, quiere destacar la profesionalidad y agradecer su implicación en este proyecto.

   Técnicamente, la operación se dividió en tres partes. Una primera de elevación del conjunto de su ubicación original, mediante la estructura metálica superior que fue construida a tal efecto y la colocación de unos gatos hidráulicos en la pontona. Con el fin de evitar sacudidas bruscas en esta maniobra, los gatos fueron asumiendo la carga de forma progresiva y cada dos intervalos intermedios de carga se paralizó el tiro para inspeccionar con buzos la zona.

   Así, a las 13,15 horas horas se izó el pecio separándolo del fondo a 1,50 metros. Tras verificar que el pecio se había despegado del fondo, se volvió a realizar una nueva inspección para comprobar la correcta disposición de las cinchas de suspensión. Posteriormente, se procedió a elevarlo aproximadamente 1,50 metros del fondo y se volvió a inspeccionar. A continuación, se anotó la carga total elevada por el conjunto de los gatos (50 toneladas, menos de lo estimado), así como por cada uno de ellos individualmente. Estos valores fueron suministrados al ordenador que ha controlado el sistema hidráulico de elevación para, de esta forma, alertar de cualquier problema durante la siguiente fase de la operación.

   La segunda maniobra consistió en el traslado del pecio, siguiendo una trayectoria de navegación hasta el recinto de destino que había sido comprobada previamente asegurando la existencia de calado suficiente. En todo momento, el recorrido se siguió mediante GPS. La velocidad de traslado alcanzó un máximo de un nudo, con el fin de que el pecio no se viera afectado por los efectos del flujo de agua. Durante toda la maniobra se fue controlando el peso del conjunto, con el objetivo de asegurar que no se produjeran pérdidas de material durante la operación de traslado.

   La tercera de las maniobras fue la de descenso en el recinto de destino --que había sido previamente preparado con una base y un perímetro de protección--, realizando previamente un nuevo registro de datos de carga para comprobar que, en efecto, no había habido ninguna pérdida durante el traslado, por lo que los buzos se volvieron a sumergir para comprobar el estado del pecio.

   Una vez comprobado que no existían anomalías, se procedió a apoyar el pecio sobre el fondo y, antes de posarlo totalmente sobre el fondo marino, se realizó una última inspección. Sobre las siete de la tarde, el pecio quedó depositado en su lugar de destino.

   Por último, reseñar que es la primera ocasión en España que se realiza una operación de este tipo, que no hubiera sido posible sin la coordinación entre las administraciones y empresas implicadas, en concreto, la Consejería de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, la Dirección General de Infraestructuras y Explotación del Agua, el Centro de Arqueología Subacuática, la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, la dirección arqueológica, la dirección de obra y la empresa encargada de los trabajos submarinos.

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