Jerez

Máxima igualdad en un choque que no tuvo goles

Un punto más y la reaparición de José Mari que volvió nueve semanas después es el balance positivo que puede hacer el Xerez de un derbi regional disputado en el Nuevo Arcángel bajo el signo de la máxima igualdad entre los dos equipos

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai Publicidad Ai
Cargando el reproductor....
', image: '', autostart: true, controls: true });

Un punto más y la reaparición de José Mari que volvió nueve semanas después es el balance positivo que puede hacer el Xerez de un derbi regional disputado en el Nuevo Arcángel bajo el signo de la máxima igualdad entre los dos equipos.

U  n reparto de puntos que se puede considerar justo. El Córdoba llevó la posesión y el control en el primer periodo; el Xerez mandó en el segundo; Maldonado perdonó ante Alberto García en el minuto 21 y Pepe Díaz vio cómo un esférico en vaselina sobre la salida de Chema  se estrellaba en el larguero en el 70.

Patino se lesionaba para los verdiblancos en el minuto 21 de partido y  dieciséis más tarde era el xerecista Manu Redondo el que, por la misma circunstancia, se retiraba al banquillo. Igualdad de fuerzas, los mismos errores ante las metas contrarias , con un Fede Vivo que estrelló el esférico en el lateral de las mallas por fuera y Tato que no supo concretar en una buen balón llovido del cielo. Manu Redondo, antes de retirarse lesionado, salvó un balón ante Fede Vico que buscaba concretar un centro de Dubarbier y Alberto García atajó una falta lanzada por José Vega y que no terminó encontrando rematador. Chema se lució también en un remate de Cristián y Alberto García se mostró muy atento para actuar de libre cuando su defensa se dejaba ganar las espaldas.


Igualdad  máxima y empate que suena a justicia visto lo visto sobre el terreno de juego. Al Xerez le faltó un punto de profundidad a la hora de que los delanteros se sintiesen más arropados en sus llegadas en el segundo tiempo. Fernández daba facilidades por su banda pero las acciones de Álvaro Rey no llevaban el peligro que desear fuese. Tato volvió a encontrarse muy solo y José Vega fue un querer u no poder. José Mari salió ya tarde y poco pudo aportar y Adrián Ruiz le dio más chispa al juego atacante, pero se perdía en jugadas personales que no terminaban de fructificar para bien. Le faltó al Xerez que jugadores como Rueda se incorporasen más al juego ofensivo. El de Linares no estuvo bien en su faceta defensiva pero le faltó conectarse más con un Tato que se terminó aburriendo de luchar en solitario. Keita volvió a estar de lujo, pero obviamente no es el hombre encargado de organizar, aunque incluso pudo marcar en una saque de esquina si David Prieto no le hubiese importunado.


Defensivamente no se le pueden poner pegas al juego azulino. Muy bien, pero con el peligro de que un fallo siempre cuesta un gol. Ayer no se pagó el error gracias al barro que se acumulaba en la zona de la portería de Chema. Pepe Díaz se quedó solo y realizó una vaselina sobre la salida del meta, pero el balón botó en el barro y se fue al larguero. Ahí tuvo el Xerez esa pizca de fortuna que le ha faltado en otros encuentros.


También le faltó arrojo cuando se quedó once minutos en superioridad numérica, pero ya se sabe lo que ocurrió en el choque ante el Alcorcón, que el equipo se fue arriba y se pagó con la derrota. Ayer el equipo no hizo locuras, buscó la testa de José Mari, pero no encontró opciones de gol en esa recta final que los de Berges jugaron sin Cristián, expulsado por doble amarilla, la segunda por sacar el codo en un salto con José Manuel Rueda.


En definitiva, un derbi regional que no pasará a la historia y un punto más, que habrá que hacer bueno en Chapín.

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN