San Fernando

Cofrades isleños dejan pequeña la Catedral de Cádiz en la peregrinación

San Fernando es la primera ciudad de la diócesis de Cádiz y Ceuta que peregrina a la Seo gaditana por la invitación del obispo.

Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
  • El arcipreste en el inicio. -

La Seo gaditana se ha quedado pequeña este mediodía ante la extraordinaria presencia de cofrades isleños de las hermandades de penitencia y gloria, que han participado en una ceremonia, dentro de los actos enmarcados dentro del Año de la Fe y atendiendo la invitación del obispo diocesano, Rafael Zornoza Boy.

Medio millar de cofrades isleños han llenado la Santa Iglesia Catedral de Cádiz, después de concentrarse en la iglesia de San Juan de Dios, donde el arcipreste de San Fernando, Alfonso Gutiérrez Estudillo, destacó la importancia de atender la invitación del obispo diocesano y el hecho de ser la primera ciudad que peregrinaba a Cádiz para ganar la indulgencia en la Seo gaditana, dentro del Año de la Fe.

Numerosos turistas y gaditanos siguieron la procesión de las hermandades isleñas hasta la Catedral. Todas, con excepción de la hermandad de Nuestra Señora del Rosario en sus Misterios Dolorosos, con una junta gestora y en vías de desaparecer si nadie lo remedia, formaron un largo cortejo para entrar por la puerta principal de la Seo gaditana.

En total fueron 26 las hermandades isleñas presentes en mayor o menor medida, pues algunas llevaban un buen número de hermanos y otras ni siquiera la junta de gobierno al completo. Pero pese a todo, la Catedral de Cádiz se quedó pequeña.

Las banderas y estandartes de las hermandades isleñas fueron dispuestas en torno al altar mayor de la catedral, en una ceremonia presidida por Rafael Zornoza Boy y concelebrada por el arcipreste de San Fernando.

La Coral Logar de la Puente, bajo la dirección de José González García, estuvo a un gran nivel y aportó una enorme solemnidad a la ceremonia, algo que llenó de orgullo a los cofrades isleños y al mismo arcipreste de San Fernando, que pudo presumir ante el obispo, de la respuesta del mundo cofrade isleño.

El Lignum Crucis de la hermandad de la Vera-Cruz cerró la procesión desde la iglesia de San Juan de Dios hasta la Catedral y presidió, en el altar mayor toda la ceremonia. En la misma estuvieron presente además el primer teniente de alcalde, Francisco José Romero Herrero, y la delegada de Servicios Sociales y Educación, María José Moreno Subirana.

Por delante queda ahora la preparación de la exposición conmemorativa del Año de la Fe, que se inaugurará en septiembre.
 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN