La Policía Nacional ha detenido a dos hombres, de 41 y 44 años, acusados de sustraer al menos 39 teléfonos móviles de alta gama y de otros útiles informáticos procedentes del Centro Comercial El Corte Inglés y de su posterior venta en dos establecimientos comerciales de la capital y de la localidad de Belicena (Granada).
Los hechos se desencadenaron cuando el Departamento de Seguridad del citado centro comercial presentó una denuncia en la Comisaría de distrito Centro en la que manifestaba que habían echado en falta la citada mercancía, la cual debía haber sido repartida y preparada para la venta en uno de sus establecimientos y que sin embargo no había llegado a su destino.
Puesta en marcha la investigación, que en todo momento contó con la colaboración del personal del Departamento de seguridad de El Corte Inglés, los policías centraron las investigaciones sobre un repartidor que proveía de mercancías al citado centro comercial.
Realizadas ciertas gestiones por parte de los investigadores, se pudo saber que el citado transportista había desviado presuntamente varias terminales de telefonía móvil de alta gama que debían ser entregados para su venta en el centro comercial, y que además, esas terminales eran desviadas hacia dos tiendas, una situada en la capital y la otra en Belicena.
Según pudieron saber los policías, el transportista llevaba suministrando teléfonos móviles por esa vía, al menos a una de las tiendas, desde el pasado mes de octubre. En las tiendas, dichos teléfonos se vendían a un precio muy inferior al real de mercado de esos útiles.
Realizadas ciertas comprobaciones por parte de la Policía y comprobada la relación del transportista con lo sucedido, los agentes procedieron a su detención, y a la recuperación de algunos efectos presuntamente sustraídos con este modus operandi.
En ese estado las cosas, los policías procedieron a la detención del titular del establecimiento y a la intervención de los móviles y objetos de alta gama que tenían esa procedencia.
Los efectos sustraídos fueron recuperados en gran parte y entregados a su legítimo propietario, el centro comercial El Corte Inglés en calidad de depósito judicial.
El operativo ha sido desarrollado por el Grupo de Delincuencia Urbana de la Comisaría de Distrito Centro de Policía Nacional de Granada, siendo puestos los detenidos a disposición de la autoridad judicial competente.
