Jerez

Pilar Sánchez, imputada por los desfases de tesorería del Plan E

La ex alcaldesa socialista tendrá que responder ante el juez por los desfases de tesorería detectados por el PP en las obras del Plan E y la Ciudad del Flamenco

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  • Pilar Sánchez

La ex alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, ha sido imputada de nuevo como consecuencia de su gestión al frente del Ayuntamiento. En este caso, el origen de la denuncia se encuentra en los desfases de tesorería detectados por el actual Gobierno local y correspondientes a fondos concedidos al Consistorio para obras del Plan E y del proyecto de la Ciudad del Flamenco que fueron destinados a otros fines, según consta en la documentación presentada en su momento.   
La ex alcaldesa socialista también se encuentra imputada en estos momentos en otros dos procesos judiciales abiertos en su contra: el del caso de los asesores -denunciado por Pedro Pacheco- y del caso del PTA -que partió de una denuncia del PSA-.
Por lo que respecta al nuevo caso, que parte de una denuncia del Gobierno local de julio de 2011, ya se sabe que en febrero de 2012 la Fiscalía de Jerez trasladó el caso al Juzgado de Instrucción correspondiente tras considerar los hechos como constitutivos de un presunto delito continuado de prevaricación y otro  de fraude de subvenciones, apuntando directamente a Pilar Sánchez como responsable penal de los hechos.
El auto resultante ya ha sido notificado oficialmente y en el mismo se da cuenta de la imputación de la ex alcaldesa por su presunta responsabilidad en el desfase de tesorería denunciado.
El Gobierno municipal trasladó el caso a la Fiscalía a finales de julio de 2011, apenas mes y medio después de su toma de posesión, ante los desfases de tesorería detectados que afectaban a fondos finalistas de los planes estatales. La decisión se tomó al entender que era un caso “de una gravedad extrema”, sobre todo por sus consecuencias económicas para el Ayuntamiento, ya que como resaltó la actual alcaldesa en su día, María José García Pelayo, “la falta de aplicación total o parcial” de estos fondos a los fines propuestos implicaba “la obligación de reintegrar las cantidades no justificadas”, de ahí que se procediera a su denuncia tras detectarse un desfase de tesorería que fue elevado en un primer momento a 7,6 millones de euros y, en la denuncia final, a 8,6 millones, tal como consta en el escrito de la Fiscalía.

“Con los fondos se realizaron pagos distintos a su finalidad”

El dinero correspondiente a los desfases de tesorería detectados formaba parte de los ingresos realizados por el Gobierno central como parte de los pagos de la convocatoria 2010 de los Planes E y de la subvención para las obras de la Ciudad del Flamenco.  Las partidas mal utilizadas de las obras del plan anticrisis sumaban 5,2 millones de euros, por los 2,4 de la ayuda para las obras del complejo dedicado al flamenco. La teoría del Gobierno local es que los fondos resultantes de esos desfases de tesorería se utilizaron mayoritariamente para abonar nóminas de la plantilla municipal, y también para hacer frente a algunos pagos a proveedores. En su momento, el portavoz del Gobierno local, Antonio Saldaña, destacó que todas estas  operaciones no tenían el visto bueno del interventor municipal ni de la tesorería. El delegado de Economía, Enrique Espinosa, apuntó que las “anomalías detectadas” se realizaron sobre “fondos finalistas depositados en cuentas restringidas” que el anterior gobierno utilizó para pagos “distintos a su finalidad”.

Catorce proyectos afectados por el desfase

El delegado Enrique Espinosa aseguró en su momento que el gobierno de Pilar Sánchez utilizó dinero del Plan E para pagar parte o la totalidad de la nómina desde 2010 y completar pagos pendientes a los proveedores, y subrayó que el “saldo deficitario” al que dio lugar fue de 5.221.986,75 euros, tras restar las reposiciones realizadas. Por lo que respecta a la Ciudad del Flamenco, el saldo negativo ascendía a 2.441.185,06 euros.  El delegado de Economía concretó que fueron 14 los proyectos que se vieron afectados por esta situación y para los que el Gobierno de España aprobó actuaciones de mejora, entre los que se encontraba el museo de Lola Flores, que estaba sin iniciar pese a que la obra estaba adjudicada, la Ciudad de los Niños o la rehabilitación del patio principal y los claustros de Santo Domingo, por ejemplo.

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