Córdoba

El Mirandés certifica permanencia y condena a Racing, Murcia y Huesca

Desde los primeros compases quedó claro a quién le iba la vida en el partido. Los rojillos no tardaron en coger las riendas del partido ante un Córdoba que se "paseaba" por El Arcángel

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai

El Mirandés se estrenó a "lo grande" en El Arcángel, ya que sumó un vital triunfo (1-2) en su primera visita al estadio en donde ha certificado su permanencia matemática y con ello condena al descenso al Racing de Santander, Real Murcia y SD Huesca.

Desde los primeros compases quedó claro a quién le iba la vida en el partido. Los rojillos no tardaron en coger las riendas del partido ante un Córdoba que se "paseaba" por El Arcángel.

A los diez minutos de juego, Mújika pudo inaugurar el marcador tras trazar una buena diagonal por la derecha y enganchar una volea que mandó el balón rozando la escuadra izquierda de Saizar que debutaba en Liga en la meta blanquiverde.

Pese a que la intensidad de los burgaleses cayó poco a poco por el fuerte calor, superada la media hora, Mújika adelantó al Mirandés al mandar a la red un buen centro de Alain tras llegar a línea de fondo.

Con la permanencia en sus manos se fue el Mirandés al descanso y a los cinco minutos de la reanudación la certificó para mandar a Segunda B a Racing, Murcia y Huesca. Fue Alain el encargado de aprovechar el regalo de los centrales blanquiverdes para batir, libre de marca, a Saizar en su salida.

El partido estaba visto para sentencia, al margen de que el Córdoba no se acercaba a las inmediaciones de Goitia. De hecho a veinte minutos del final el ex cordobesista Díaz De Cerio pudo hacer el tercero para el Mirandés hasta en dos ocasiones.

Primero vio como Saizar repelió su remate y luego estrelló el balón en el larguero del marco local.

De Cerio se mostró muy activo en su regreso a El Arcángel y pudo marcar cinco minutos después, pero de nuevo se topó con Saizar que envió a córner para evitar un mayor desastre para el Córdoba que se despidió de la temporada en casa con una sonora pitada de su afición pese a que Xisco acortara distancias a tres minutos del final.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN