La Policía Nacional ha intervenido 6.400 gramos de marihuana y 63 plantas en una actuación que se ha saldado con cinco detenidos y que se inició después de que un patrulla interceptase un vehículo en cuyo maletero hallaron droga que acababa de ser robada en un cortijo junto al perro pastor alemán que guardaba la finca.
El turismo, con tres ocupantes a bordo y en el que se encontraron 6,4 kilos de marihuana, fue parado a las 05,00 horas del miércoles en el camino que conecta las barriadas capitalinas de Loma Cabrera y La Cañada, en la capital, cuando circulaba con las luces apagadas, según ha informado la Comisaría Provincial en una nota.
Al abrir las puertas del vehículo, detectaron que el coche desprendía un fuerte olor a marihuana, por lo que realizaron un registro exhaustivo del vehículo e intervinieron 6,4 kilos sustancia estupefaciente que se encontraba oculta en el maletero, demás de un machete de acero escondido bajo el asiento del conductor y una navaja de mariposa que portaba uno de los arrestados.
En el transcurso de la investigación, los agentes encargados del caso averiguaron que las plantas de marihuana y el perro pastor alemán habían sido robadas en un cortijo muy próximo a la calle Piñas de Almería.
ALERTADOS POR EL FUERTE OLOR A MARIHUANA
Durante la inspección policial realizada por los agentes en el cortijo donde se había producido el robo, los investigadores notaron un fuerte olor a marihuana, posiblemente causado por un cultivo de cannabis sativa en el cortijo colindante.
Los agentes corroboraron este hecho tras observar desde el muro que separa las dos fincas, una habitación anexa a la vivienda con gran cantidad de plantas del estupefaciente y con un sofisticado sistema de ventilación.
Finalmente, los investigadores se incautaron en este otro cortijo de otras 63 plantas de marihuana. El invernadero indoor contaba con lámparas refractarias, ventiladores y una conducción de gases al exterior a través de tubos de aluminio. Durante la intervención se procedió a la detención de los dos propietarios de los cortijos como presuntos autores de un delito contra la salud pública.
La Policía Nacional tiene activado un dispositivo policial para garantizar la seguridad en los barrios periféricos almerienses de los Molinos, La Cañada, El Alquián, Retamar o Costacabana entre otros en el que participan agentes de los Grupos de Atención al Ciudadano y agentes de Policía Judicial. El objetivo es prevenir, y en su caso reaccionar, frente a posibles hechos delictivos que pudieran producirse en estos barrios como son los delitos contra la propiedad o los cultivos intensivos de sustancias estupefacientes.
