Málaga

Unicaja afianza cuarta plaza con un cómodo triunfo y hunde al Manresa

Gracias a su mayor potencial y al acierto del escolta esloveno Zoran Dragic -máximo anotador con 16 puntos-, aunque también destacaron el ala-pívot Domantas Sabonis y el pívot Fran Vázquez

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • VICTORIA MALAGUISTA -

El Unicaja afianzó su cuarta plaza en la tabla con un cómodo triunfo por 91-75 ante La Bruixa D'Or, al que hunde aún más en los puestos de descenso cuando sólo faltan cuatro jornadas para acabar la primera fase de la liga.

Gracias a su mayor potencial y al acierto del escolta esloveno Zoran Dragic -máximo anotador con 16 puntos-, aunque también destacaron el ala-pívot Domantas Sabonis -que cumplía 18 años y anotó 13 puntos- y el pívot Fran Vázquez, el Unicaja no dio opción a los de Manresa, que llegaron a perder por 24 puntos (68-44, m.27).

Los de Pere Romero abrieron el marcador por medio de Hernández nada más empezar el choque, pero fue un absoluto espejismo porque los malagueños cogieron las riendas del partido, ya no las soltaron hasta el final y con un parcial de 12-0 se pusieron por delante (12-2, m.4), con cinco puntos de Caner-Medley, que fue una pesadilla para los manresanos, y otros cinco de Earl Calloway.

La Bruixa D'Or intentó reaccionar con un parcial de 1-7 (13-9, m.7), pero su esfuerzo fue baldío, ya que la maquinaria del Unicaja, muy bien engrasada y con muchas alternativas, de nuevo impuso su poderío para llegar al final del primer cuarto con doce puntos de ventaja (24-12, m.10).

En el segundo parcial siguió la misma tónica de juego, con los malagueños muy bien en defensa y atinados en el ataque. Aunque el serbio Marko Ljubicic acortó distancias (26-18, m.11), el Unicaja evitó cualquier despiste e incluso aumentó su supremacía (48-25, m.19, la máxima renta hasta entonces) para irse 48-32 al descanso.

La segunda mitad, con Mindaugas Kuzminskas muy entonado, continuó con dominio del conjunto malagueño, que siguió sin pasar apuros (55-34, m.22, tras un triple del alero lituano; y 60-39, m.24, tras otro triple en este caso de Dragic), una ventaja de veintiún puntos con la que entró en el último cuarto (72-51, m.30).

El Unicaja mantuvo una diferencia de entre 20 y 18 puntos ante la impotencia del Manresa, que, sin embargo, la redujo y dio la cara hasta el final (79-65 m.36 y 85-71 m.38), aunque no pudo con el auténtico rodillo del equipo malagueño, que venció por un rotundo 91-75 y logró así su sexta victoria seguida (incluida la Euroliga).

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN