Exmineros de Boliden que realizan tareas medioambientales y de control de acceso en la mina de Aznalcóllar (Sevilla) para la empresa Tragsa se concentraron este martes en las puertas de acceso a la explotación para reclamar la continuidad de sus puestos de trabajo, e iniciarán este mismo martes un encierro de carácter indefinido para pedir que se les garantice la continuidad en su puesto, tras haber sido "despedidos" el pasado miércoles, sin que la nueva adjudicataria de la explotación minera, México-Minorbis, "se haya hecho cargo ya de ellos".
Fuentes del sindicato CCOO han indicado a Europa Press que la concentración se desarrolla con normalidad por parte de los 14 trabajadores afectados y apuntan que por el momento "no hemos tenido noticias ni de la Administración ni de México-Minorbis".
Las fuentes han recordado que estos exmineros "están despedidos desde el 1 de abril, cuando finalizó la encomienda de gestión a Tragsa para efectuar dichas labores. No obstante, han precisado que los trabajadores "han seguido manteniendo los turnos de trabajo y siguen con las labores de control de acceso, pues abandonar eso sería una irresponsabilidad".
Por ello, junto a la concentración, estos trabajadores iniciarán un encierro desde este martes, de carácter indefinido, en las instalaciones "hasta que se resuelva esto". Por ello, piden una solución "o bien de la empresa adjudicataria o bien desde la Junta".
Han recordado que en el caso de los exmineros que trabajaban con Egmasa --actual Agencia Amaya-- "sí se les ha dado continuidad", mientras que Tragsa, empresa pública que depende del Gobierno central, "no les ha dado continuidad".
Las fuentes han explicado que Tragsa "plantea que no puede contratar con empresas privadas, al ser una empresa pública de ámbito estatal", por lo que los trabajadores piden que "busquen otros procedimientos, bien la Junta o bien México Minorbis, para atender a estos trabajadores".
"No nos explicamos cómo un proyecto de estas características con tantos millones y tanta inversión comienza así", han añadido las fuentes sindicales, que apuntan que se trata de "14 trabajadores que tienen mas de 30 años de experiencia minera, por lo que sería una irresponsabilidad abandonar esas tareas".
