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Deportes

Mañana expira la cuenta atrás

Sin comprador a la vista, el club de San Pablo aguarda las horas más críticas de sus 28 años de historia

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  • En manos de CaixaBank -

El Club Baloncesto Sevilla no despierta de su pesadilla y visto lo visto no parece tampoco que lo vaya hacer mañana. La tesitura por la que atraviesa la entidad de San Pablo no termina, pero como todo en la vida tiene un límite y este para CaixaBank finaliza el 14 de julio.

Es el día señalado en los calendarios del club para que un patrocinador en forma de empresa o institución pusiera sobre la mesa los dos millones de euros que reclama la financiera catalana para sellar a su nombre las acciones del Caja. Y lo cierto es que el presidente Fernando Moral, haciendo gala de su apellido, no ha parado de buscar la salvación. Ha llamado a todas las puertas de las empresas sevillanas, como Persán o Abengoa, pero no hay visos de que el baloncesto interese a los empresarios sevillanos.

Mientras tanto, con la agonía llegando al cuello, CaixaBank deberá dirimir mañana si alarga o no el plazo de compra-venta. Y es que a pesar de que esté entre las opciones que la entidad bancaria siga siendo la propietaria, lo cierto es que nadie da ni una peseta de la antiguas por ello. Lo único en lo que pueden favorecer a estas alturas es en acordar con Jefferson Capital ampliar el plazo de la venta. De hacerlo sería un escueto halo de esperanza. Sino, colorín colorado tras 28 años.

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