Según consta en la documentación, la historia se remonta al año 1904, cuando el Ayuntamiento cede en usufructo las instalaciones al entonces Ministerio de la Guerra.
En una actualización del inventario de bienes municipales llevada a cabo hace pocos años, se detectó la existencia del inmueble, se localizó y se detectó que se encontraba sin uso, por lo que el concejal de Patrimonio, Gabriel Orihuela, comenzó a realizar las gestiones necesarias para su recuperación.
En una sentencia del 3 de febrero de 2005, se da por cancelado el usufructo registral. Sin embargo, la resolución judicial no llegó a ejecutarse en la práctica. El 22 de septiembre de 2008, Orihuela llevó una propuesta a la Junta de Gobierno para “solicitar de manera amistosa” a la Gerencia de Infraestructuras de la Defensa “el desalojo y entrega de la finca de titularidad municipal número 5413 cuartel General Castaños.
Correspondencia
La propuesta siguió su curso, y según informó el Consistorio, el proceso culminó ayer mismo, con la recepción en la Casa Consistorial de un escrito del Ministerio de Defensa, por el que comunica que, para dar cumplimiento a la sentencia de 3 de febrero de 2005, “el Ejército de Tierra ha desalojado las instalaciones del acuartelamiento General Castaños.
En consecuencia, se puede proceder a la entrega a ese Ayuntamiento de la parte del citado acuartelamiento a la que se refiere la sentencia”.
Orihuela se mostraba ayer “muy satisfecho” por la noticia de la devolución del inmueble, “no por el edificio en sí, que está en estado de ruina total, sino por lo que supone de poder disponer en esa zona de 7.000 metros cuadrados de suelo para equipamientos públicos”.
Según explicó el delegado, el siguiente paso será ahora “delimitar perfectamente la superficie, de forma conjunta con la Gerencia de Infraestructura”, ya que este cuartel se anexionó a otras instalaciones de Artilleria que conforman hoy un espacio de en torno a los 12.000 metros cuadrados de superficie.
