De un lado, el éxodo de ciudadanos linenses, prácticamente la mitad de la población, que fue provocado por el cierre ocasionó que La Línea de la Concepción “entrara en una espiral crítica y caótica y en un subdesarrollo absoluto”. “Afortunadamente”, añade Juárez, “de aquello la ciudad se recuperó, pero los años de retraso, la mala planificación de las ayudas recibidas que recayeron en todos menos en La Línea y la masiva emigración son hechos que todavía están ahí y son latentes”.
Reclamó Juárez una reflexión “sobre lo sufrido y lo percibido por hacernos cargo de pagar los platos rotos de la política de Estado con respecto a Gibraltar. Si compensamos una cosa y otra tendremos meridianamente claro que seguimos siendo acreedores de lo que perdimos en los años de incomunicación con el Peñón”.
“Afortunadamente el problema de las pensiones se corrigió con retraso, pero acabó bien. Queda ahora el problema que persiste en la falta de medidas que corrijan los perjuicios que sufren en el plano social y laboral los actuales trabajadores”.
Para Juárez, tanto la ciudad como su masa laboral siguen con una latente reclamación que no es oída por Madrid. Sobre esta misma línea de reivindicaciones, el alcalde ha dado a conocer el cálculo final estimatorio de las pérdidas de los ex trabajadores españoles en Gibraltar por el cambio ficticio de la libra aplicado entre 1943 y 1969. La cantidad total resultante alcanza los más de 341 millones de euros.
“En vez de estar el Gobierno franquista agradecido lo que hacía era aplicar un cambio ficticio para quedarse con buena parte del dinero de los trabajadores”. Este asunto sigue siendo impulsado políticamente para que alguna autoridad del Banco de España se pronuncie, como paso previo para iniciar una reclamación oficial.
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Por su parte el primer candidato del Partido Andalucista en las inminentes elecciones al Parlamento Europeo, Carlos Bautista, declaró en el curso de la campaña que “la llegada a Europa de una voz de obediencia estrictamente andaluza valdrá también para que la situación de discriminación injusta que viven los actuales trabajadores españoles en Gibraltar se ponga sobre la mesa del debate”.
Asegura que buscarán “iniciativas para que el Parlamento Europeo analice la legislación laboral del Peñón y quede claramente de manifiesto si los trabajadores españoles están discriminados por su nacionalidad respecto de los trabajadores que poseen la nacionalidad británica”. Al margen de ello pide que el tema se trate en el Foro Tripartito.
