San Fernando

Ochenta años del asesinato del alcalde Cayetano Roldán Moreno

Una sencilla ceremonia unió el recuerdo del que fuera médico comprometido y alcalde con el de otros represaliados durante los primeros meses de Guerra Civil.

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Cargando el reproductor....

Una ceremonia con familiares de asesinados y represaliados en la Guerra Civil Española y en los años que la siguieron, junto a personas unidas por el objetivo común de dignificar el pasado, los nombres de quienes yacen en la fosa común de cementerio municipal y cerrar heridas de una vez. Los que puedan.

Una asociación que promueve esa recuperación de la memoria y cuyo objetivo principal se encuentra en su propio nombre, la Asociación por la Recuperación de la Memoria Democrática, Social y Política de San Fernando.

O sea, que no se trata de cualquier recuperación, sino que es mucho más lo que se persigue y máxime en este año en el que se cumplen -motivo principal del acto- los 80 años del asesinato del médico y alcalde de San Fernando, Cayetano Roldán Moreno, sino que comienza a moverse la tierra, tras las conciencias, para exhumar los restos y restaurar el recuerdo y el legado de ese recuerdo.

El ex presidente de la Asociación, Juan Manuel Fernández Roldán, actuó como familiar y como maestro de ceremonias,  de una ceremonia que transcurrió por los dictados del corazón, cada uno con su aportación al acto, desde poemas al comunicado del PSOE local que en nombre del concejal Ignacio Bermejo mostró su solidaridad con los objetivos que se persiguen.

Al fin y al cabo, socialistas eran los más que están allí enterrados y por serlo los mataron. Quedó claro en los testimonio de familiares que con el retrato de sus antepasados contaban su pequeña y cruel historia.

Una canción en un rincón del cementerio que habla del olvido y del rescate del pasado - “porque hay que estar alegres, ya hemos llorado bastante”, que dijo Fernández Roldán- y un mensaje grabado en el móvil de quien no pudo acudir porque no la dejó la distancia pero envió sus palabras de esperanza a los presentes. De esperanza, sobre todo. Sin rencor. Pero sin olvido.

Puertorrealeños
También había una representación puertorrealeña que lleva más avanzado los trabajos, que ya han tapado la zanja de 33 metros de larga por más de dos metros de alta, con cemento que han pintado de rojo, para que quien vaya allí pregunte del por qué de ese color en un cementerio, que no sea el color de las flores.

Cuantos allí yacen son héroes para sus familiares, aunque hay familiares que sólo han sabido de que sus antepasados está allí gracias a los libros que se publican y dan nombres y fechas.

Son héroes para el resto porque algunos pudieron haber huido y no lo hicieron para que las represalias no cayeran sobre sus familiares, lo que unas veces consiguieron y la mayoría, no.

Y son héroes porque murieron, también en muchos casos, sin delatar a nadie, por lo que salvaron de la muerte posiblemente a más personas de las que murieron.

Pero volviendo al motivo principal de la convocatoria, el octogésimo aniversario de la muerte de Cayetano Roldán Moreno, ya le había hecho justicia el martes pasado el catedrático de Cirugía y académico de la Real Academia de San Romualdo de Ciencias, Letras y Artes, José Manuel Revuelta Soba, en su conferencia sobre la medicina y los médicos de La Isla.

Revuelta Soba habló de él como un gran médico y una gran persona y mostró su satisfacción porque el antiguo ambulatorio Hermanos Laulhé -precisamente ese- se llame ahora Alcalde Cayetano Roldán Moreno.

Lo que pretenden
Algunos dicen en la Guerra Civil Española hubo barbarie por los dos bandos. ¡Cómo no iba a ser así en una guerra fratricida. O en cualquier guerra”.

Pero los que murieron por la barbarie del bando republicano ya fueron suficientemente reivindicados -incluso sobre la marcha- por el bando rebelde. O sea, lo que pide ahora la Asociación por la Recuperación de la Memoria Democrática, Social y Política de San Fernando. Eso sí, ochenta años después.

Miguel Ángel López Moreno, representante del Ateneo Republicano y Memorialista de La Isla (ARMI), ya comentó en el mes de abril pasado los avances realizados por el grupo de trabajo que está llevando a cabo el estudio histórico de la fosa, incluyendo aspectos en relación con las dimensiones de la misma, así como sobre el número de posibles personas inhumadas, que según las últimas estimaciones superaría las 200.

Más de 200 personas cuyos nombres saldrán a la luz en un proceso en el que serán los familiares los que decidan qué se hace. Una dirección de correo electrónico (familiaresfosasanfernando@gmail.com) sirve de contacto con el grupo de personas que trabaja en este fin.

.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN