Jerez

El ‘blues’ del autobús

El gobierno local planea convocar un pleno para someter de nuevo a votación los presupuestos de 2016 este martes o miércoles

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  • El pleno del jueves -
  • n El Gobierno insiste en que la única solución pasa por aprobar el presupuesto y rechaza las modificaciones planteadas por el PP
  • Ganemos comparó a la alcaldesa con la conductora de un bus a punto del siniestro
  • El PSOE aspira como mínimo a arrancar una abstención “técnica” de Ganemos

El pleno del pasado jueves necesitaba rock and roll, pero lo que tuvo fueron acordes de blues. El rechazo a los presupuestos presentados por el Gobierno para el presente año supuso un mazazo para el ejecutivo y deja en el aire el futuro del Teatro Villamarta y Emuvijesa. Pese a su voto en contra, tanto PP como Ganemos Jerez consideran que aún hay opciones para salvar ambas entidades, pero el Gobierno insiste en lo contrario a partir de los informes emitidos al respecto desde Intervención.

Los ecos del pleno siguen sonando a blues atormentado, como el del blues del autobús: lo de menos es quien lleve el volante, lo importante es la dirección a la que nos dirigimos.

Pese al bloqueo actual, el Gobierno se muestra confiado en agotar todas las opciones posibles, entre las que planean la convocatoria de un pleno este martes o miércoles en el que se someta de nuevo a votación el presupuesto, con la esperanza de contar con la abstención de las dos fuerzas citadas o de cualquiera de las dos.

Lo cierto es que aunque tanto PP como Ganemos hayan coincidido en el no, ambos lo hacen desde dos perspectivas diferentes: el PP, de tipo ideológico; Ganemos, de tipo político.
En el PP, su portavoz María José García Pelayo, recalcaba este viernes que no podían votar a favor de un presupuesto “opuesto al que haríamos si gobernásemos”, al tiempo que insistía en que su postura no obedecía a “intereses políticos, sino a cuestiones de tipo ideológico”. Además, desde el PP lamentan que el PSOE “haya generado la alarma mintiendo sistemáticamente ante una situación que tiene solución”.

En Ganemos Jerez, su portavoz, Santiago Sánchez, se encargó de dejar muy claro en el pleno que no apoyarían el presupuesto: “Estos podrían ser los mejores presupuestos del mundo, pero la experiencia nos dice que no nos podemos fiar de la persona que tiene que ejecutarlos, porque ha incumplido las promesas que nos hizo”, sentenció, para volver a demandar su dimisión como alcaldesa. Además, consideró que “hay herramientas para solucionar” cuestiones tales como las que afectan al Teatro Villamarta o Emuvijesa con el presupuesto prorrogado y negó que la situación sea “tan apocalíptica ni dramática” como está describiendo el Ejecutivo local.

Fue entonces cuando Sánchez -Santiago- puso el ejemplo del autobús. Un autobús en el que viajan todos los ciudadanos de Jerez y con Sánchez -Mamen- al mando del volante. El autobús se va a estrellar, “pero a ella le da igual con tal de salvarse a sí misma”, en vez de ceder el volante a otra persona para que ponga a salvo a los pasajeros.  

El ejemplo es bastante gráfico, metafóricamente hablando, a la hora de entender la visión de la situación por parte de Ganemos, aunque el propio PSOE no comparta su perspectiva: “Del PP me esperaba el no, pero no de ustedes”, recriminaba el delegado de Economía, Santiago Galván, a la bancada donde se sitúan los cinco concejales de Ganemos, que ni siquiera entraron a debatir el contenido de unos presupuestos que contemplan algunas de las aportaciones realizadas durante el proceso de redacción.

El Gobierno local insiste en que aún queda margen para el acuerdo, y tiene como ejemplo lo ocurrido con los presupuestos de 2015, que fueron aprobados inicialmente el 2 de diciembre. Caso de no lograrlo éste sería prorrogado automáticamente el próximo 1 de enero, tal y como ocurrió el año pasado. Si por aquel entonces el Ejecutivo local consiguió in extremis el apoyo de Ganemos, gracias a un “sí técnico”, en este caso no cabe duda de que se conformaría con una “abstención técnica”. Es, de hecho, a lo que se aferra de cara a la posible nueva convocatoria de pleno para este martes o miércoles, confiado asimismo en que la presión ambiental -con el futuro de la plantilla del Villamarta en juego- les haga cambiar de parecer.

El PP, por su parte, opta por la vía de las modificaciones presupuestarias. Este mismo viernes remitieron un informe al Gobierno local en el que aportaban “tres soluciones al Villamarta y Emuvijesa para poder realizar las modificaciones presupuestarias antes del 31 de diciembre de 2016 que permiten la continuidad” de ambos entes, ya que “atendiendo al grado de ejecución de los presupuestos y el análisis histórico de los mismos, al final del año 2016 habrá crédito disponible para atender a las modificaciones presupuestarias que deben aprobarse”.

El Gobierno local agradeció la “intención del PP de aportar soluciones” y atendió su aportación “con interés”, aunque, poco después, confirmó que las áreas municipales de Economía e Intervención habían concluido que “con el presupuesto actual, prórroga del de 2015, se hace inviable  efectuar las modificaciones presupuestarias necesarias para cubrir los gastos contemplados en el Proyecto de Presupuesto de 2016, para lo que se necesitan 26 millones de euros”. El Gobierno considera que “no es cuestión de vestir a un santo para desvestir a otro”. Porque, “además, en el caso de que la propuesta del PP hubiese sido posible, la situación solo hubiese permitido de todas formas salvar el Villamarta y Emuvijesa a costa de otros servicios”.

Para los populares, “la contestación a nuestras propuestas demuestra dos cosas: que el PSOE ha mentido una vez más, y que no tiene voluntad de solucionar nada, y lo único que pretende es blindarse políticamente con unos presupuestos prorrogados hasta las próximas elecciones sin tener que cumplir sus promesas”.

Con música o sin ella, los ecos del pleno siguen sonando a blues atormentado, como el del blues del autobús: lo de menos es quien lleve el volante, lo importante es la dirección a la que nos dirigimos.

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