El sanluqueño es un representante de referencia no solo europeo tras su reciente reelección como presidente deEuropêche, que agrupa a las empresas pesqueras del continente, sino que además lidera la ICFA (Coalición Internacional de Asociaciones Pesqueras). Además, es secretario de Cepesca, la Confederación Española de Pesca.
“El ‘stock’ del atún rojo se ha recuperado por el esfuerzo de los pescadores y porque la situación no era tan mala como la pintaban”
Nuevo periodo como presidente en Europêche, ¿a qué cree que se debe dicha confianza?
—En el fondo es un reconocimiento a la importancia que tiene la pesca española en el ámbito europeo. No podemos olvidar que España es el país pesquero líder en la Unión Europea.Es de los pocos sectoreseconómicos en los que España es líder en la UE. Eso, además del trabajo que tanto mi equipo como yo estamos desarrollando ha debido ser la base para que confíen de nuevo en mí para los próximos dos años.
¿Qué balance hace de su gestión desde que llegó a la presidencia en 2009 y qué retos principales se propone?
—El balance en Europêche es positivo. Hace unos años, cuando yo lo cogí, atravesábamos un bache. Sin embargo, hoy en día Europêche es un interlocutor muy conocido en el ámbito europeo, por todas las instituciones comunitarias y también por el resto de las partes interesadas, las ONG, los consumidores, los otros grupos de interés relacionados con la comercialización, de distribución etcétera. Creo que hacemos un buen papel en defensa de los intereses de los armadores europeos. Uno de los retos más importantes para estos dos años tiene que ver con el Mediterráneo, es intentar revertir la situación de los stocks en el Mediterráneo. Esteaño, loscientíficos, y especialmente la Comisión Europea, daban la voz de alarma diciendo que el 93% de las poblaciones del Mediterráneo estaban sobreexplotadas. Nosotros como Cepesca, como sector pesquero español, intentamos liderar la adopción de medidas para intentar revertir la situación. Hemos estado en distintas reuniones con m inisterios, con comunidades autónomas, con científicos, etcétera, y de lo que se trata es de poner en marcha el año que viene medidas que nos permitan por un lado revertir la situación de los stocks y por otro lado, mantener la actividad pesquera que es tan importante para zonas altamente dependientes de la pesca, incluidas muchas de Andalucía. Lo que hemos hecho en el ámbito europeo es crear un grupo de trabajo 'ad hoc' del Mediterráneo para intentar consensuaresas posiciones en el ámbito europeo con nuestros colegas de Malta, de Italia, y de otros países del Mediterráneo. Otro factor importante es el cumplimiento y la aplicación del artículo 15 del Reglamento Base y que regula la Política Pesquera Comúnque se refiere a la obligación de desembarque. Hoy en día, todos los países e incluso la Comisión Europea son conscientes de quela aplicación tal cual de la legislación de desembarque como está aprobado en el artículo 15 del Reglamento Base es imposible de cumplir. Durante la negociación, España ya llamaba la atención de todos los ministros y de la Comisión Europea diciendo que íbamos a tener serios problemas con lo que se llama “especies de estrangulamiento” en las que a lo mejor nuestra flota no tiene cuotas, entran en la red, y habrá algún momento en el que habrá que desembarcar. Está todo el mundo quejándose y diciendo que hacen falta mayores mecanismos de flexibilidad y una mayor gradualidad para intentar poner en marcha ese artículo. El gran reto va a ser buscar soluciones para evitar que la flota a los dos o tres meses de realizar su actividad estén paradas en los puertos porque no tienen cuotas de esas especies de estrangulamiento aunque sí tengan de las otras especies principales. Es algo que preocupa a todo el mundo, incluyendo por supuesto a los andaluces.
¿Cómo afecta en concreto a nivel general a España y en concreto a la provincia de Cádiz la Política Pesquera Común (PPC)?
—Afecta a todo. La Política Pesquera Común que se mueve y decide en Bruselas son las normas que tenemos queaplicar los pescadores de toda la Unión Europea.Es una de las pocas políticas comunes donde la UE tiene competencias exclusivas y por lo tanto es allí donde se toman todas las decisiones que tienen que ver con la pesca, con nuestro día a día. Incluido por supuesto el golfo de Cádiz y el Mediterráneo andaluz. Hay un reglamento base que establece cuáles son los objetivos principales marcados, en este caso conseguir el rendimiento máximo sostenible de todas las especies como muy tarde en el año 2020 y cuáles son los mecanismos que hay tanto de gestión como de conservación como de control de la actividad pesquera tanto dentro de la UE como fuera de las aguas de la UE.Dentro de la UE abarcaría en el caso de Andalucía todo el caladero nacional y del mediterráneo, y fuera de la UE abarcaría acuerdos con otros países como puede ser Marruecos, Guinea-Bisáu o Mauritania que afecta principalmente por un lado a la flota marisquera de Huelva, y por otro lado a la flota artesanal de pesca de bajura de puertos importantes como Barbate, Tarifa, Algeciras o Conil. Como decía, las decisiones se toman allí y nosotros somos quienes tenemos que aplicarlas. Y a través de nuestras asociaciones, en el caso de Andalucía, con la Federación Andaluza de Asociaciones Pesqueras, que a su vez es miembro de Cepesca, que a su vez agrupa a mucha de las asociaciones de armadores de Andalucía, y a través nuestra, con nuestras asociaciones de ámbito europeo como Europêche, y de ámbito mundial como ICFA, la Coalición Internacional de Asociaciones Pesqueras, de la que yo también soy el presidente, pues ahí defendemos nuestros intereses en el ámbito español, en el ámbito europeo, y en el ámbito internacional. Aunque parezca que está muy lejos, también en Naciones Unidas, en la FAO... se toman decisiones que afectan al día a día de nuestros trabajadores.
¿Qué perspectivas hay para la pesca del atún en los próximos años?
—Tras haber sufrido unos recortes importantísimos en las cuotas, de más del 60% en los últimosaños,
y tras la puesta en marcha de un plan de recuperación muy duro en el que se encontraban esos recortes y medidas de control, la realidad es que el stock del atún rojo se ha recuperado como nadie en el sector científico podía imaginar. Hoy en día está en niveles de biomasa insólitos. Eso se debe, primero, atodo el sacrificio que ha hecho la flota europea, y en particular la española, pero también se debe a que la situación no estaba tan mala como algunos lo pintaban, y decían incluso que estaba en
peligro de extinción,algo totalmente falso. La situación en la actualidad es que los pescadores califican la situación como una pandemia, porque hay tanto atún rojo que lo difícil es no pescarlo.
¿Cómo ve la situación de Andalucía dentro del sector que representa?
—En cuanto a Andalucía, además de mejorar las cuotas de pesca que tienen los andaluces, estoy convencido de que si hubiera buena voluntad por parte de las distintas asociaciones y cofradías serían capaces de hacerlo mejor. Tienen que invertir más tiempo y medios en mejorar lacom ercialización y en vender mejor sus productos adaptando su oferta a la demanda que hay. Estoy seguro que con las ayudas que vienen ahora del fondo europeo marítimo y pesquero, a través principalmente de la creación de organizaciones de productores, las cuales algunas están en proceso de creación, estoy convencido de que se podrán utilizar esos medios para mejorar la comercialización y para conseguir una mejor retribución para los pescadores.
¿Qué imagen tiene España a nivel internacional en cuanto a la aplicación de políticas sostenibles en la pesca?
—Creo que en los últimos años ha cambiado considerablemente y para mejor. Un aspecto clave ha sido que hoy tenemos la política de inspección y control más dura de toda la UE y posiblemente del mundo, y tenemos un sistema contra la pesca ilegal también muy eficaz. Por otro lado, en relación a la sostenibilidad, estamosintentandoliderar muchas iniciativas para que se conozca en el mundo que los españoles intentamos hacer las cosas bien, las hacemos bien, y nos preocupamos por el estado de
las distintas poblaciones, por nuestros pescadores y armadores y por la seguridad alimentaria.
