El Parlament de Catalunya no podrá aprobar la ley del voto electrónico para los catalanes que viven en el extranjero en el próximo pleno de la semana que viene, el último antes de que la Cámara eche el cierre por vacaciones.
Fuentes de Cs consultas por Europa Press han explicado que ya han tomado la decisión de llevarla ante el Consell de Garanties Estatutàries (CGE) para que analice si se adecua a la Constitución y al Estatut.
Esta decisión del partido de Inés Arrimadas supondrá aplazar al menos un mes el debate final de la ley en el pleno, por lo que ya deberá abordarse tras las vacaciones parlamentarias.
Asimismo, fuentes del PSC aseguran que sopesan hacer lo mismo ya que creen que la ley podría ser incompatible con la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (Loreg), pero tomarán una decisión definitiva este martes.
EL PARLAMENT Y EL 1-O
Esta ley fue anunciada por el Govern en junio de 2016 y fue presentada como la norma que debía permitir a los catalanes que viene en el extranjero votar de forma electrónica en las elecciones al Parlament.
La Generalitat considera que el Estado pone muchas a trabas a los catalanes que votan desde el exterior, y consideraron que con esta ley sería factible sortearlas.
Pese a que tenía que ser una ley para las elecciones al Parlament, la consellera de Gobernación, Meritxell Borràs, abrió la puerta a que se pudiera utilizar también para que votasen en el referéndum del 1 de octubre los catalanes que viene en el exterior.
El hecho de no poder aprobar esta ley hasta después del verano añade dificultades a que se pueda utilizar esta norma para el referéndum.
Fuentes parlamentarias admiten que ya era muy difícil que así fuera pese a este nuevo contratiempo, ya que la Generalitat ni tan siquiera ha empezado las pruebas piloto para implementar este tipo de voto.
¿MAYORÍA CUALIFICADA?
Tras las vacaciones de verano JxSí y la CUP tendrán una dificultad añadida para aprobar esta ley: los letrados de la Cámara consideran que se necesita una mayoría cualificada de 90 diputados para sacarla adelante, ya que es una norma que desarrolla la ley electoral, y así lo expresaron en una reunión de la Mesa del Parlament.
JxSí y la CUP suman 72 diputados y, según los letrados de la Cámara, necesitarían otros 18 para sacarla adelante, y PP, Cs y el PSC ya han anunciado que están en contra de la norma, por lo que no hay los votos suficientes para aprobarla.
C's pidió a la Mesa del Parlament un informe de los letrados de la cámara para que pusieran por escrito si la ley del del voto de los catalanes en el extranjero suponía una modificación de la ley electoral, pero la Mesa --con mayoría de JxSí-- rechazó hacer la solicitud.
