El crecimiento de la actividad del sector servicios de España registró en agosto su mayor expansión desde el pasado mes de marzo, según refleja el índice de gerentes de compras (PMI), que subió a 54,3 puntos desde 52,9 en julio, lo que sugiere que la economía española crecerá a un ritmo cercano al 0,5% en el tercer trimestre, según IHS Markit, que advierte de la fuerte divergencia con el sector manufacturero, cuya producción se frenó a mínimos desde 2013.
El aumento de la demanda, principalmente nacional, que compensó el debilitamiento de la demanda procedente del exterior, ejerció presión en la capacidad y llevó a una nueva acumulación de los pedidos pendientes, así como a una modesta creación de empleo. Por su parte, la confianza del sector con respecto al futuro cayó hasta su nivel más bajo desde mayo de 2013.
Sin embargo, los márgenes de beneficios estuvieron bajo presión, ya que los precios medios de los insumos aumentaron notablemente en agosto, extendiendo el período actual de inflación a cuatro años y medio, debido al incremento de los costes laborales y del transporte.
"Los últimos datos del estudio confirman que es probable que España siga siendo una de las economías europeas con mejores resultados durante el tercer trimestre del año, con un crecimiento del PIB aparentemente estable en torno al 0,5%", apuntó Paul Smith, economista de IHS Markit.
En general, el sector privado español registró en agosto una mejora hasta niveles del pasado mes de abril, según el índice compuesto de gerentes de compras, que se situó en 52,6 puntos, frente a los 51,7 de julio.
"No obstante, persistió un notable desequilibrio entre el comportamiento del sector manufacturero y del sector servicios. Mientras que el sector servicios registró su mayor crecimiento desde marzo pasado, la producción manufacturera disminuyó al ritmo más fuerte desde mayo de 2013", advierten los autores del estudio.
En este sentido, la encuesta refleja que las incertidumbres económicas y políticas mundiales están afectando a la confianza, que cayó a su mínimo de 75 meses, lastrando la contratación, lo que hizo que el crecimiento del empleo en el sector privado fuese el más débil en casi cinco años.
"Puesto que la divergencia entre el sector servicios y el sector manufacturero está actualmente entre las mayores de la historia del PMI, parece poco probable que el sector servicios pueda mantener su trayectoria de crecimiento actual", advirtió Paul Smith.
