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Sevilla

"Finis gloriae mundi", ya en el Bellas Artes para aniversario de Valdés Leal

El lienzo "Finis gloriae mundi" de Juan de Valdés Leal ya está en el Museo de Bellas Artes de Sevilla para la muestra de los 400 años del nacimiento del pintor

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El lienzo "Finis gloriae mundi" de Juan de Valdés Leal, uno de los dos de "Las Postrimerías" que están desde hace más de tres siglos colgados en las paredes del Hospital de la Caridad de Sevilla, ya ha sido trasladado al Museo de Bellas Artes de esta ciudad, donde dentro de unos semanas se inaugurará una gran exposición para celebrar el 400 aniversario del nacimiento del pintor y escultor sevillano.


La operación de descenso del emblemático cuadro de Valdés Leal, un lienzo que pesa unos 90 kilos situado en una de las paredes laterales del sotocoro del Hospital de la Caridad, ha estado supervisada por la conservadora Marisa Caballero-Infante, responsable de Patrimonio y Gestión Cultural de la Hermandad de la Santa Caridad, ha informado la Junta de Andalucía.

Este cuadro, que con "In ictuoculi" forma parte de "Las Postrimerías" y que es una de las cumbres del Barroco sevillano, solo ha salido en cuatro ocasiones desde su ejecución en 1671-1672 de su templo, donde está anclado a la pared por medio de unos raíles instalados en el siglo XIX.

Ya en el suelo, la obra, con un pesado marco realizado por Bernardo Simón de Pineda, se situó en dos plataformas con ruedas que sirvieron a los operarios para su traslado a un cajón especialmente diseñado para sus dimensiones –2,20 metros de altura por 2,16 de anchura– y concebido para evitar vibraciones y movimientos durante el viaje en un camión desde la iglesia del Hospital de la Santa Caridad al Museo de Bellas Artes, emplazamientos separados por apenas 2,3 kilómetros.

"Finis gloriae mundi" muestra el interior de una cripta funeraria a la luz de un ventanuco que permite ver algunos cadáveres en descomposición. En primer término, un obispo comienza a ser devorado por los gusanos y un caballero de la Orden de Calatrava yace con los signos de la muerte en su rostro. Al fondo se amontonan más huesos humanos en desorden junto a una lechuza y un murciélago.

Sobre esta escena, la mano llagada de Cristo sostiene una balanza en la que se sopesan las buenas obras frente a los vicios, simbolizados en el plato de la izquierda por diversos animales. Las buenas obras son encarnadas por instrumentos de penitencia, una hogaza de pan, libros de oraciones y un rosario.

Este cuadro, junto a "In ictuoculi", que han servido para que a Valdés Leal se le llame "el pintor de los muertos", fueron encargados por Miguel Mañara, que desde 1661 fue el gran impulsor de la Santa Caridad Sevilla.

A principios del siglo XIX, el crítico de arte Ceán Bermúdez recogió un comentario que hizo Murillo a Valdés Leal al ver este lienzo: "Compadre, este cuadro no se puede mirar sino con las manos en las narices...".

La exposición "Valdés Leal (1622-1690)" reunirá un total de 85 piezas entre lienzos, esculturas, grabados y dibujos, pero también libros y objetos domésticos procedentes de Londres, París, Hamburgo, Barcelona, Madrid y ciudades andaluzas como Córdoba, San Roque, Málaga, Jaén y Sevilla.

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