Nueva Zelanda se ha convertido en el primer país en legalizar el pago de salarios en criptomonedas, después de que el Departamento de Ingresos Internos (IRD por sus siglas en inglés), la agencia tributaria neozelandesa, haya emitido un dictamen por el que a partir del próximo 1 de septiembre y durante un periodo inicial de tres años será legal abonar el salario de los trabajadores por cuenta ajena en criptoactivos.
La legislación aprobada, publicada el pasado 7 de agosto, estipula que el pago de la retribución en criptomonedas represente de forma regular una parte fija del salario de los trabajadores por cuenta ajena, excluyendo expresamente a los autónomos de los potenciales perceptores.
Asimismo, la regulación exige que estos criptoactivos puedan convertirse «de forma directa» en una moneda fiat y que el valor del mismo esté vinculado a una o más monedas fiduciarias.
En opinión del regulador, «no todos los tipos de criptoactivos podrán ser tomados en consideración», explicando que para ser validados como «sueldo o salario» deben ser lo suficientemente similares a las nociones existentes de salario para lo que no deberán estar sujetos a periodos de bloqueo y se podrán convertir directamente a una moneda fiduciaria, además de que el propósito del activo criptográfico sea funcionar como una moneda.