La capital hispalense ha celebrado este 2 de octubre el Día del Patrón de la Policía Nacional, coincidiendo con la celebración del Bicentenario del Cuerpo, con la plaza de España como escenario para 294 agentes, en un acto institucional presidido por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; el director general de la Policía Nacional, Francisco Pardo; y autoridades como el presidente de la Junta, Juanma Moreno; y el alcalde, José Luis Sanz, entre otras.
Se han entregado condecoraciones, han desfilado las unidades y se ha rendido homenaje a los caídos, finalizando así una semana de actividades con el que la Policía Nacional ha podido “estrechar lazos con los sevillanos”, acercando su trabajo policial y afianzando su “compromiso inquebrantable” con la protección y el servicio público a la ciudadanía.
“Es un cuerpo vivo, en constante evolución y transformación, versátil y capaz, que ha sabido adaptarse para cumplir siempre su compromiso inquebrantable con la protección y el servicio público”, ha dicho el ministro.
Grande-Marlaska confirmó que “Andalucía y particularmente Sevilla” han experimentado un incremento de “más de un 11% de la plantilla”, contando con más de 30.000 policías nacionales y guardias civiles en la región.
Ha reaccionado así a las demandas del alcalde, José Luis Sanz, para que Sevilla cuente con más agentes. “Es algo que se puede observar clara y directamente, con una presencia mucho más importante de los efectivos en las calles y en todas las unidades de actuación de los agentes”, ha valorado Grande-Marlaska.
Ha recordado que en 2023 España alcanzó el máximo histórico de efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que sumaron más de 156.000 hombres y mujeres por primera vez en la historia. “Una cifra que seguirá creciendo con sucesivas ofertas de empleo público, que han hecho posible revertir una década de pérdida de agentes”, ha dicho.
También ha reconocido que “España es hoy uno de los países más seguros del mundo”. Desde el año 2022 mantiene una tasa de criminalidad sostenida, de 48 delitos por mil habitantes, “una de las más bajas de la Unión Europea”.
Espera que esa realidad sea “el mejor antídoto para atajar los mensajes alarmistas, interesados y falaces, que bordean los discursos de odio, y propagan bulos sin base sobre inmigración y delincuencia”.
Ha dicho: “Tenemos hoy una buena ocasión para rebatir con datos las mentiras que dañan nuestra convivencia. El volumen de ciudadanos extranjeros residentes en España ha crecido entre 2011 y 2023 un uno por ciento. Sin embargo, la tasa de criminalidad convencional ha descendido 6,1 puntos en el mismo periodo”.
