Publicidad Ai
Publicidad Ai

Andalucía

Las aves esteparias experimentan una evolución positiva generalizada en la comunidad andaluza durante 2010

El consejero de Medio Ambiente firma nuevos convenios de colaboración para conservar estas especies con los socios del proyecto Life+

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Firma del convenio -
Los censos realizados por la Consejería de Medio Ambiente han determinado una estabilización e incremento generalizado de las poblaciones de aves esteparias en la comunidad andaluza, evolución positiva que coincide con el inicio en 2010 del Proyecto Life+ ‘Conservación y gestión en las zonas de especial protección para las aves esteparias de Andalucía’. Así lo ha afirmado hoy el consejero de Medio Ambiente, José Juan Díaz Trillo, durante la firma de acuerdos entre su departamento y el resto de socios del programa.

Durante 2010, en el marco del Programa de Seguimiento de Fauna Silvestre, se ha censado la población reproductora de avutarda común, ganga ortega, ganga ibérica, alondra ricotí, aguilucho cenizo y, por primera vez en la historia, la canastera común. Esto ha proporcionado datos actualizados de la diversidad, abundancia, densidad, distribución y evolución poblacional de las aves esteparias en Andalucía, mostrando para la mayoría tendencias poblacionales estables o en aumento. Según Díaz Trillo, los resultados están permitiendo fijar las medidas de conservación y los objetivos más adecuados dentro del Programa de Conservación de las Aves Esteparias y el citado proyecto Life+.

La población reproductora de avutarda común se ha estimado en 447 individuos (120 machos y 327 hembras) divididos en nueve núcleos poblacionales, con un crecimiento anual del 4,4%. Díaz Trillo ha afirmado que los valores de sexratio (2,7 hembras por macho) y de productividad (unos 0,2 pollos por hembra) se sitúan en el rango de poblaciones estables y en expansión, mientras que la población actual representa el 88% del máximo poblacional establecido para esta especie en Andalucía en 1981.

Por su parte, la población de machos de sisón común (único sexo que es posible censar durante la reproducción) se estima en 6.011 individuos, lo que supone un incremento de casi el 15% respecto a 2007. La densidad es de 1,27 aves por kilómetro cuadrado, superior a la del censo nacional de 2005 que se fijó entre 0,5 y 1 individuo. La especie no muestra signos de declive y en la actualidad se distribuye por todas las provincias andaluzas, aunque se concentra en el valle del Guadalquivir y ha aumentado en Sevilla, Córdoba y Huelva.

En cuanto a la ganga ortega, las poblaciones reproductoras se encuentran en una situación estable, con un mínimo de 810 individuos reproductores, que representan el 85% del máximo poblacional establecido en Andalucía. Se han producido incrementos destacables en la población de Jaén y existe una importante representación al norte de Córdoba. No obstante, el consejero ha aclarado que su distribución, principalmente por los pastizales y barbechos arados de las subbéticas y el sureste seco de Almería, está fragmentada.

La población de aguilucho cenizo se estima en 1.010 parejas, y se distribuye sobre todo por las campiñas cerealistas del valle del Guadalquivir. Gracias al incremento del éxito reproductor, la especie se ha estabilizado tras el fuerte declive del 50% sufrido en la pasada década. Esto garantiza su viabilidad a largo plazo y se debe en gran medida a la puesta en marcha del Programa de Actuaciones para la Conservación del Aguilucho Cenizo de la Consejería de Medio Ambiente en 2004.

La población de cernícalo primilla se encuentra en una situación estable (algo menos de 5.000 parejas) con cierta tendencia al incremento. La especie se distribuye por todas las provincias, aunque también está mejor representada en las extensas campiñas del valle del Guadalquivir, y Sevilla es la provincia que cuenta con mayor población (cerca del 40%). El titular andaluz de Medio Ambiente ha afirmado que esta situación de estabilidad depende de la correcta restauración de edificios históricos en las colonias urbanas y de la conservación de edificios en las rurales.

Por otro lado, los censos no son definitivos en el caso de la ganga ibérica, aunque no parece existir un descenso significativo y cuenta con una población mínima de algo más de 200 individuos. El grueso de la población se circunscribe al Espacio Natural Doñana, aunque desde 2007 se ha producido un incremento en el tamaño y la distribución en el noroeste de Córdoba. Se estima que la capacidad máxima de acogida de la comunidad andaluza para estas especies es de 600 individuos.

Finalmente, la alondra ricotí ha experimentado en los dos últimos años un ligero aumento hasta colocarse en 2010 en 42 machos territoriales localizados (21 en Granada y 21 en Almería). Aunque el seguimiento por parte de la Junta está permitiendo localizar nuevos núcleos reproductores, la especie experimentó un importante declive en la última década y actualmente es la que se encuentra en estado más crítico de Andalucía.

Firma de acuerdos
Durante el acto celebrado hoy el consejero ha dicho que en la actualidad Andalucía es la región con mayor número de especies de esteparias de España, concretamente 25, de las que 15 mantienen algún grado de amenaza. Díaz Trillo ha recordado también que la Consejería de Medio Ambiente es el organismo encargado de liderar las actuaciones del programa Life+ y ha anunciado la firma de diversos convenios de colaboración que permitirán a la Junta poner en marcha nuevas medidas de gestión y conservación en terrenos agrícolas de las provincias de Córdoba, Sevilla y Málaga. Estos acuerdos se suscribirán entre la Junta y el resto de socios del proyecto, que cuenta con 8,6 millones hasta 2013 para preservar estas aves y mejorar sus hábitats en las campiñas cerealistas de Andalucía.

Dicho proyecto fue solicitado por Medio Ambiente y para lograr sus objetivos dispone de la participación de la Consejería de Agricultura y Pesca y del apoyo de diversas entidades implicadas en la gestión de estas aves. Los socios con los que se han alcanzado acuerdos son las asociaciones de agricultores Asaja, Coag y Upa, la Mancomunidad de Municipios Valle del Guadiato, la asociación ecologista Seo/Birdlife, Red Eléctrica de España, Endesa y Fundación Enresa, así como las dos empresas públicas de Medio Ambiente y Agricultura, Egmasa y Desarrollo Agrario y Pesquero.

El proyecto Life+ Esteparias fue concedido por la Unión Europea a la Junta de Andalucía y dispone de una financiación comunitaria correspondiente al 55 por ciento del presupuesto. Por su parte, la contribución de la Consejería de Medio Ambiente asciende a un tercio del total, con una aportación de 2,9 millones euros. El resto corresponde a los otros cofinanciadores y beneficiarios asociados.

El objetivo principal es mejorar la situación en la que se encuentran las aves esteparias en las ZEPA del Alto Guadiato (Córdoba), Campiñas de Sevilla, Fuente de Piedra y Campillos (Málaga), con la idea principal de potenciar entre el sector agrario el importante papel medioambiental y económico de estas aves y su potencial para el desarrollo económico. Desde febrero de 2010 se han puesto en marcha diversas acciones, como la aprobación de un plan de recuperación, la creación de un boletín electrónico y una página web, la celebración de reuniones con los socios del proyecto, o el mantenimiento de charlas con agricultores. Entre los resultados concretos, además de incrementar la implicación de los propietarios privados en la conservación mediante convenios y crear iniciativas de desarrollo local vinculadas al turismo de naturaleza, se prevé una reducción del 60-90 por ciento en las causas de muerte.

Respecto al Plan de Recuperación para las Aves Esteparias en Andalucía, ha sido aprobado recientemente en Consejo de Gobierno e incluye dos especies en peligro de extinción (la avutarda común y el torillo andaluz); una vulnerable (el aguilucho cenizo), y cuatro de interés especial (la alondra ricotí, la ganga ibérica, la ganga ortega y el sisón). Evitar la fragmentación de hábitats, mantener prácticas agrícolas y ganaderas sostenibles y mejorar la rentabilidad de los aprovechamientos extensivos tradicionales son los principales objetivos del plan, para lo que contará con una amplia colaboración de propietarios de fincas, ya que estas especies se asientan preferentemente en campiñas cerealistas y pastizales adehesados, sobre todo en los altiplanos granadinos y almerienses, la campiña sevillana, el norte de Málaga o las comarcas del Alto Guadiato (Córdoba) y el Andévalo (Huelva).

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN