El presidente electo de Irán, Masud Pezeshkian, afirmó este sábado que Estados Unidos debería darse cuenta de que Irán no responderá a las presiones, haciendo referencia a las sanciones que Washington ha impuesto contra Teherán tras su salida del acuerdo nuclear en 2018.

“Estados Unidos también necesita reconocer la realidad y comprender, de una vez por todas, que Irán no responde ni responderá a las presiones”, aseveró Pezeshkian en un comunicado dirigido al mundo, que espera una apertura en la política exterior iraní tras la victoria del reformista en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del 5 de julio.

El presidente electo iraní criticó la salida “ilegal” de Estados Unidos del acuerdo nuclear firmada en 2015, “mientras Teherán estaba cumpliendo plenamente sus obligaciones”.

El reformista denunció que “a través de las sanciones unilaterales extraterritoriales”, EE.UU. infligió “cientos de miles de millones de dólares en daños a nuestra economía y causando sufrimiento, muerte y destrucción al pueblo iraní, particularmente durante la pandemia de covid”.

Además, recordó el asesinato del general iraní Qasem Soleimani en Bagdad, por Estados Unidos en 2020, y lo calificó como “terrorismo de Estado”.

Aun así, el presidente electo iraní, que será investido el próximo 30 de julio, aseguró que su política exterior se basará en los principios de "dignidad, sabiduría y prudencia".

“Acogeremos con agrado los esfuerzos sinceros para aliviar las tensiones y corresponderemos la buena fe con la buena fe”, manifestó.

Pezeshkian dijo que su administración “aplicará una política impulsada por las oportunidades, creando equilibrio en las relaciones con todos los países”, en consonancia con los intereses nacionales, el desarrollo económico y los requisitos de la paz y la seguridad regionales y globales.

Relaciones con Europa

También criticó la inacción europea tras la salida unilateral de EE.UU. del acuerdo nuclear, afirmando que no cumplieron ninguno de sus 11 compromisos asumidos para “salvar el pacto y mitigar el impacto de las sanciones ilegales y unilaterales” de Washington.

“Estos compromisos implicaban garantizar transacciones bancarias efectivas, la protección efectiva de las empresas contra las sanciones estadounidenses y la promoción de inversiones en Irán”, indicó.

Pezeshkian reprochó que los países europeos que incumplieron todos estos compromisos ahora esperen que “Irán cumpla unilateralmente todas sus obligaciones” con el pacto nuclear.

Sin embargo, el futuro mandatario iraní expresó su esperanza por “entablar un diálogo constructivo con los países europeos para encaminar las relaciones por el camino correcto, basado en principios de respeto mutuo y condiciones de igualdad”.

“Hay numerosas áreas de cooperación que Irán y Europa pueden explorar una vez que las potencias europeas acepten esta realidad y dejen de lado la supremacía moral de autoarrogancia junto con las crisis fabricadas que han plagado nuestras relaciones durante tanto tiempo”, agregó.

Lazos con países vecinos

 El sucesor del fallecido presidente iraní Ebrahim Raisí dijo que la prioridad de su gobierno en la política exterior será fortalecer las relaciones con los países vecinos.

“Defenderemos el establecimiento de una región fuerte en lugar de una donde un solo país persiga la hegemonía y el dominio sobre los demás, declaró haciendo referencia a EE.UU.

Llamó a los países de Oriente Medio a utilizar sus recursos para el “progreso y desarrollo de la región en beneficio de todos”.

“Creo firmemente que las naciones vecinas y hermanas no deberían desperdiciar sus valiosos recursos en competencias erosivas, carreras armamentistas o en la contención injustificada de unas a otras”, afirmó.

Agregó que su gobierno buscará cooperar con Turquía, Arabia Saudí, Omán, Irak, Baréin, Catar, Kuwait, los Emiratos Árabes Unidos y organizaciones regionales para profundizar sus vínculos económicos y reforzar las relaciones comerciales.

La amistad con Rusia y China

Pezeshkian valoró la amistad y el apoyo de Rusia y China a su país “en tiempos difíciles”.

“Nuestra hoja de ruta de 25 años con China representa un hito importante hacia el establecimiento de una "asociación estratégica integral" mutuamente beneficiosa y esperamos colaborar más ampliamente con Pekín a medida que avanzamos hacia un nuevo orden global”, manifestó.

En cuanto a Rusia, lo calificó como “un valioso aliado estratégico”, y señaló que su administración “seguirá comprometida a ampliar y mejorar” las relaciones entre ambos países.

“Seguiré dando prioridad a la cooperación bilateral y multilateral con Rusia, particularmente dentro del marco de los BRICS, la Organización de Cooperación de Shanghai y la Unión Económica Euroasiática”, aseguró.