En Málaga, se habla un día sí y otro también de la proliferación de las denominadas técnicamente como Viviendas de Uso Turístico (VUT), ese tipo de alojamiento que ha crecido sin suficiente control y al que, con nuevas normativas en la mano, se les quiere poner cordura, más allá de los candados y cajas con clave numérica que han florecido por doquier en el Centro y zonas aledañas..
Así, el Ayuntamiento, a través del Área de Urbanismo, ha asegurado que
solicitará a la Junta de Andalucía la cancelación de la inscripción de 1.120 viviendas de uso turístico en el Registro de Turismo de Andalucía (RTA), según la concejala delegada de Urbanismo, Carmen Casero. Se trata, indicaron fuentes municipales, de una acción que se enmarca en las medidas que el Consistorio lleva a cabo para limitar en ciertas zonas la implantación de nuevas viviendas de este tipo.
Como recordaron las mismas fuentes, la
limitación aprobada por el Ayuntamiento, a través de una instrucción, establece que todas aquellas declaraciones responsables presentadas por los propietarios de viviendas de uso turístico para su alta en el RTA, desde la entrada en vigor en febrero del Decreto 31/2024, deben
cumplir el requisito establecido en el Plan General para los usos terciarios.
Así, Casero ha señalado que el capítulo 6 define el uso del servicio terciario como "el que tiene por finalidad la prestación de servicios al público, a las empresas y a los organismos", que incluye como usos pormenorizados terciarios distintos al de oficinas el de hospedaje, recreativo, hostelería, comercio y gran superficie minorista y define el uso de hospedaje como "el servicio terciario que se destina a proporcionar alojamiento temporal a las personas, tales como hoteles, moteles, paradores, pensiones, residencias, etcétera".
Un capítulo se refiere a que "una actividad de este grupo podrá desarrollarse
en edificio destinado total o parcialmente a viviendas, solo en el caso de que disponga de elementos de acceso y evacuación adecuados independientes de los del resto del edificio, así como de
instalaciones generales (luz, agua, teléfono, etc.) asimismo totalmente independientes de las del resto del edificio".
Es una medida que se engloba, según Casero, "en el
compromiso del Ayuntamiento de Málaga por establecer una limitación de viviendas de uso turístico donde existan zonas saturadas". Por ello, aseguró que “está a
punto de finalizar el análisis sobre el impacto que la implantación de las viviendas de uso turístico está teniendo sobre el mercado de la vivienda que está realizado Espacio Común Coop que será la base del texto de la nueva normativa de zonificación por la cual se podrá prohibir, tras su aprobación inicial, la implantación de nuevas viviendas de uso turístico en determinadas zonas de la ciudad”.
Un pleno ‘movidito’ por la vivienda
Este anuncio realizado por el consistorio capitalino llega junto a la celebración
pleno ordinario del mes de julio en el que la vivienda volverá a centrar
gran parte del debate, con mociones desde todas las partes: del
PP para pedir al Gobierno la activación de mecanismos para optar a fondos europeos destinados a vivienda asequible; de
PSOE sobre declarar a la ciudad como zona tensionada; de
Con Málaga con medidas para abordar la
situación de emergencia habitacional.
El portavoz del grupo socialista, Daniel Pérez, ha advertido de la "situación crítica" que tiene Málaga: "
Reunimos todas las condiciones para la declaración de zona tensionada y lo que tiene que hacer el alcalde es reconocer la realidad", ha abundado. También ha advertido de que "
al alcalde le ha estallado una burbuja delante de la cara y no lo ha visto venir", acusándolo de ser responsable de que "esto haya ido creciendo de forma desproporcionada y se haya convertido en un desmadre".
Desde el PSOE piden una moratoria de la concesión de alojamientos turísticos y que aquellos pisos que perdió el alquiler residencial de larga durante los recupere, entre otros.
Sin embargo, sobre esta moción del PSOE,
De la Torre ha adelantado que votarán que no, ya que "entendemos que la zona tensionada no aporta nada positivo".
Mientras tanto, desde
Con Málaga, piden
reprobar las declaraciones del regidor y de otros miembros del equipo de gobierno, "
restando importancia al grave problema que representa que jóvenes y familias malagueñas deban abandonar la ciudad por no poder acceder a una vivienda a precios asequibles".
El grupo de izquierda reclama un pacto por la vivienda y que el Ayuntamiento considere "grave problema" y lamente que "jóvenes y familias malagueñas deban abandonar su ciudad debido a la imposibilidad de acceder a una vivienda y se comprometa a
adoptar, con carácter urgente, todas las medidas que estén a su alcance para evitarlo".
