Publicidad Ai
Publicidad Ai

El cementerio de los ingleses

Miedo al negro

No puedes irte de casa de tus padres ni formar tu núcleo familiar, pero te preocupa más que se te acerque un negro

Publicado: 22/09/2024 ·
16:21
· Actualizado: 22/09/2024 · 16:21
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Autor

John Sullivan

John Sullivan es escritor, nacido en San Fernando. Debuta en 2021 con su primer libro, ‘Nombres de Mujer’

El cementerio de los ingleses

El autor mira a la realidad de frente para comprenderla y proponer un debate moderado

VISITAR BLOG

Resulta que esta semana ha salido a la luz una encuesta del CIS en la que la inmigración aparece como el principal problema que preocupa a los españoles. Sería fácil poner en duda los resultados, dada la agudeza que se ha gastado el organismo en cuestión para acertar predicciones electorales; no deja de ser irónico que los datos se pregunten a los propios votantes y, sin embargo, no den una a derechas (ni a izquierdas tampoco). Sin embargo, por incomprensible que sea la preocupación por la llegada de personas buscando un mejor futuro, me temo que esta vez si fallan es por quedarse cortos: aún queda gente que es racista y no lo dice por eso de que está mal visto.

Resulta que tenemos una inflación que, siendo de las más bajas de Europa, asfixia igualmente a los españoles. Las subidas de precios aprovechando cualquier contexto, para maquillar de compensar sobrecostes una subida brutal del margen de beneficios, han hecho que el balón de oxígeno que suponían las subidas de salario mínimo de los últimos años quede contrarrestado por el precio resultante en la cesta de la compra. En pocas palabras: hay una mayoría dentro de la muestra consultada por el CIS a quien le preocupa menos pasar hambre que la posibilidad de que se le acerque un negro.

La natalidad española es baja. Los jóvenes no pueden acceder a una vivienda, emanciparse y formar una familia. Las condiciones laborales han mejorado, pero distan mucho todavía de poder considerarse dignas. Pese a que la manoseada y blandida Constitución otorga a todos los ciudadanos el derecho y deber de trabajar, amén del derecho a un salario suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, lo cierto es que la Carta Magna vuelve a ser papel mojado: alquileres desorbitados, especulación por parte de grandes tenedores y fondos buitre, sueldos que cumplen la ley pero siguen siendo insuficientes... No puedes irte de casa de tus padres ni formar tu núcleo familiar, pero te preocupa más que se te acerque un negro.

Las mujeres, aunque avanzan, no logran alcanzar la igualdad. Sigue habiendo techos de cristal, brechas salariales y una cultura patriarcal que le asigna los cuidados familiares, con lo que torpedea su acceso y progresión en el mercado laboral. Las víctimas de violencia de género no bajan de treinta cada año, hay administraciones cuyos gobiernos eliminan puntos violeta o niegan la lacra del terrorismo machista (un día he de hablar detenidamente de esto), pero te sigue preocupando más que se te acerque un negro.

La sanidad pública está siendo desmantelada y desde los medios de comunicación tratan de convencerte de que un seguro privado de cincuenta euros al mes va a ser tu tabla de salvación. No has aprendido nada de la pandemia, cuando la pública fue la que se encargó de los pacientes de un virus que llegó de sorpresa y que se llevó miles y miles de vidas por delante. Te atiende un sanitario que lleva día y medio sin dormir debidamente, las pruebas que te hacen son limitadas y con listas de espera eternas... Es probable que, mientras llega la consulta, te cures de forma espontánea o ya no te duela nada porque te has muerto. Pero parece que te preocupa más que se te acerque un negro.

Desde luego, los bulos racistas y los medios de derechas han hecho bien su trabajo. Con la de cosas que pasan en este país, con la de blancos con corbata que te arruinan la vida y  te preocupa la inmigración... si te da miedo el negro, deberías mirar tu futuro. Que temiendo a un pobre africano, no estás viendo que el porvenir es muy negro. Y ese sí que se va a acercar.
 

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN