Planean ampliar el programa Ola de Frío de manera indefinida
Sufridores del desarraigo familiar, carencia de afecto y habilidades sociales
Para dar mejor servicio a la gente sin hogar
Sesenta usuarios han dormido en el albergue, el 95% son hombres, alcohólicos y sin trabajo
Frío, mucho frío. Los bajas temperaturas de los últimos días han dejado una ciudad helada. Las principales víctimas, personas sin techo que viven en la calle, vulnerables a morir de hipotermia. La Dirección General de Bienestar Social activó el pasado 1 de diciembre el programa Ola de Frío dirigido especialmente a este colectivo que no tiene un hogar donde dormir.
El número de usuarios se ha visto incrementado las últimas semanas. Contabilizando las asistencias, un total de sesenta personas han sido las que han pasado por las dependencias del albergue municipal de la calle Taxdirt. Del conjunto, 57 fueron hombres frente a las tres mujeres. Ahondando más en el perfil, la edad media de los usuarios se situó entre los 35 y 55 años de edad. El 95% de los que solicitó alojamiento y cama tiene serios problemas de adicción al alcohol y el 75% es consumidor habitual de otro tipo de drogas. Del total, el 95% de los usuarios son de nacionalidad española, tan sólo el 5% es de origen extranjero (Unión Europea). La ocupación media fue de once camas (las instalaciones disponen de doce).
Sobre la situación en la que se encuentran inmersos para llegar a quedarse en la calle, todos los usuarios coinciden en una serie de detonantes: desempleados, de larga duración, usuarios comunes de los recursos sociales (el 100%), desarraigo familiar y falta de habilidades sociales que los empujan a estas dramáticas circunstancias.
Durante la estancia en el albergue Bienestar Social pone a su disposición la mejor atención social, alimentación, lavandería y ayudas económicas para la compra de fármacos, desplazamiento o la tramitación de documentación personal necesaria (DNI, tarjeta de la Seguridad Social...).
Dada la efectividad que está teniendo en los últimos meses este programa de ola de frío la Dirección General de Bienestar Social que preside José Manuel Jiménez no descarta ampliar esta actuación para los sin techo de forma permanente, aunque aún no hay nada descartable.
Un programa a pie de calle
El director general de Bienestar Social, José Manuel Jiménez, valora positivamente este programa de intervención en la calle que tiende la mano al colectivo más desfavorecido por las bajas temperaturas. En el albergue municipal tienen un sitio garantizado todos aquellos que no dispongan donde dormir y prefieran evitar la sacudida de las bajísimas temperaturas registradas en los últimos días. “Este programa demuestra por la vía de los hechos que no hay ochenta personas durmiendo en la calle, tal y como manifestaba el Partido Popular”, señala. En este sentido, Jiménez vuelve a invitar a la oposición a no hacer “estrategias partidistas de de las políticas sociales porque no ayudan a la gente con carencia de recursos”.
begopikos@gmail.com
El número de usuarios se ha visto incrementado las últimas semanas. Contabilizando las asistencias, un total de sesenta personas han sido las que han pasado por las dependencias del albergue municipal de la calle Taxdirt. Del conjunto, 57 fueron hombres frente a las tres mujeres. Ahondando más en el perfil, la edad media de los usuarios se situó entre los 35 y 55 años de edad. El 95% de los que solicitó alojamiento y cama tiene serios problemas de adicción al alcohol y el 75% es consumidor habitual de otro tipo de drogas. Del total, el 95% de los usuarios son de nacionalidad española, tan sólo el 5% es de origen extranjero (Unión Europea). La ocupación media fue de once camas (las instalaciones disponen de doce).
Sobre la situación en la que se encuentran inmersos para llegar a quedarse en la calle, todos los usuarios coinciden en una serie de detonantes: desempleados, de larga duración, usuarios comunes de los recursos sociales (el 100%), desarraigo familiar y falta de habilidades sociales que los empujan a estas dramáticas circunstancias.
Durante la estancia en el albergue Bienestar Social pone a su disposición la mejor atención social, alimentación, lavandería y ayudas económicas para la compra de fármacos, desplazamiento o la tramitación de documentación personal necesaria (DNI, tarjeta de la Seguridad Social...).
Dada la efectividad que está teniendo en los últimos meses este programa de ola de frío la Dirección General de Bienestar Social que preside José Manuel Jiménez no descarta ampliar esta actuación para los sin techo de forma permanente, aunque aún no hay nada descartable.
Un programa a pie de calle
El director general de Bienestar Social, José Manuel Jiménez, valora positivamente este programa de intervención en la calle que tiende la mano al colectivo más desfavorecido por las bajas temperaturas. En el albergue municipal tienen un sitio garantizado todos aquellos que no dispongan donde dormir y prefieran evitar la sacudida de las bajísimas temperaturas registradas en los últimos días. “Este programa demuestra por la vía de los hechos que no hay ochenta personas durmiendo en la calle, tal y como manifestaba el Partido Popular”, señala. En este sentido, Jiménez vuelve a invitar a la oposición a no hacer “estrategias partidistas de de las políticas sociales porque no ayudan a la gente con carencia de recursos”.
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