Vivimos en una sociedad que se considera plural y diversa. Hay rasgos que nos hacen diferentes y únicos. En el momento de nacer pasamos a engrosar una lista, un porcentaje, pero también, pasamos a tener unos derechos que no podemos renunciar. Desde que nacemos estamos predestinados a vivir en unas circunstancias y con unas características que hacen que seamos diferentes unos de otros, y esto nadie lo puede controlar. Algunos nacen artistas, otros deportistas e incluso hay algunos que nada más nacer ostentan un cargo de la mismísima corona real. Otros en cambio no tienen la misma suerte y por un capricho de la naturaleza, son simplemente diferentes a los demás.

     Estas personas tan especiales demuestran día a día ser más capaces que discapacitados. Hay que ser conscientes de que las personas que sufren discapacidad, bien sea física o intelectual, son un claro ejemplo de superación en la sociedad. Como cualquier persona, ellos juegan, ríen, lloran, trabajan e incluso ya se ha dado el caso del primer discapacitado intelectual que termina una carrera universitaria.

     Pero no es oro todo lo que reluce y la realidad se ve empañada muchas veces. El trato de los que supuestamente se consideran “normales” a los que son diferentes a veces resulta inexplicable. En ocasiones las personas que sufren alguna discapacidad intelectual no pueden entrar en algunas discotecas, alquilar un piso e incluso para reservar una habitación en un hotel les ponen pegas. ¿Acaso son más importantes los rasgos que nos diferencian que los rasgos que nos asemejan?

     Sin embargo, para mejorar la calidad de vida de las personas que tienen algún tipo de discapacidad intelectual y a partir de ahí acabar con estas injusticias, trabajan día a día y codo con codo numerosas asociaciones, una de ellas AFANAS.

AFANAS, el gran apoyo

Esta asociación que nace el 1 de diciembre de 1979, está a pocos meses de cumplir su treinta aniversario. Cuenta con un total de 179 socios de los cuales, 54 socios son familiares y 125 son personas discapacitados intelectuales con edades a partir de 18 años.

     AFANAS que pertenece a CEAC-Andalucía cuenta con la ayuda de la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social, de los Ayuntamientos y las mancomunidades, la Fundación Once y la Fundación Cajasol.

     Entre los servicios que ofrece esta asociación se encuentran programas de apoyo a la familia, centro ocupacional, terapias de grupo, comedor, transporte y muchos otros servicios que hacen que la compleja vida de estas personas se pueda mejorar considerablemente.

     La implicación de esta asociación es cada vez mayor y de hecho, como punto de partida a esta gran iniciativa se ha colocado la primera piedra del Edificio “Almirante Pascual Cervera” de Afanas. Este acto que estuvo presidido por la delegada provincial de la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social, Manuela Guntiñas; la directora de Proyectos, Convenios y Calidad de la Fundación Once, Sabina Lobato, la directora provincial de Afanas, María Luisa Escribano; y el alcalde de Medina Sidonia, Francisco Carrera, tuvo lugar en una parcela del Prado de la Feria de la localidad asidonense y al acto asistieron numerosos vecinos de la localidad y alumnos y alumnas del futuro centro que dará cobertura a personas discapacitadas de toda la comarca de La Janda.

     El nuevo centro de atención a discapacitados de Afanas para toda la comarca de la Janda se edificará en una parcela de 2000 metros cuadrados cedida por el Ayuntamiento asidonense en terrenos del Prado de la Feria y está previsto que se inaugure en dos años.

     El edificio tendrá 1600 metros cuadrados distribuidos en dos plantas y está financiado por la propia asociación, la Diputación Provincial , que ha elaborado el proyecto de obras y es la encargada, a través del Servicio de Asistencia a Municipios de la dirección de las mismas, y la Fundación ONCE. Además, el nuevo proyecto albergará tres centros, uno de formación ocupacional que contará con 45 plazas, una unidad de día para afectados graves con 15 plazas y una residencia de adultos con 23 plazas.

     En esta primera fase de las obras, con un presupuesto de 647.514,43 euros, se llevarán a cabo la cimentación, la estructura, cubiertas, saneamiento y cerramiento del edificio. La segunda fase permitirá la finalización de las obras. Para esta segunda fase el Ayuntamiento ha solicitado la aprobación de un Taller de Empleo a través de la Mancomunidad de Municipios de la comarca de La Janda.

Vuelta a la realidad

A pesar de que esta iniciativa sea un gran avance, no hay que cantar victoria ni lanzar campanas al aire. Esto es solo el punto de partida, el comienzo. Hay que seguir luchando y trabajando para poder avanzar.

     Sin embargo, un único temor pasa por la cabeza de todo el personal que ha puesto en marcha este proyecto. Temen que todo esto se estanque o llegue un momento en el que la crisis haga mella en sus principales apoyos y no pueda seguir creciendo. Pero la ilusión que ellos tienen va más allá y están seguros de que lo van a conseguir.

     En sus cabezas está la satisfacción y la felicidad de estas personas. Seres humanos que por el azar son más especiales que los demás y que por eso, necesitan un apoyo, un impulso que les haga la vida más fácil y a su vez, les permita vivir en unas condiciones justas y no discriminatorias. Porque si bien es cierto, ellos son diferentes, pero para ser imprescindibles en la vida hay que ser eso, simplemente diferente.