La caravana de "Derecho a Vivir" (les recomiendo que echen un vistazo a su web www.derechoavivir.org) pasó por Jaén el viernes y concentró a cientos de jienenses en el parque de la Victoria...
La caravana de "Derecho a Vivir" (les recomiendo que echen un vistazo a su web www.derechoavivir.org) pasó por Jaén el viernes y concentró a cientos de jienenses en el parque de la Victoria. Allí se recabaron, además, miles de firmas en favor de la vida y se proyectaron vídeos informativos de expertos científicos y médicos que explicaban, argumentaban y demostraban el por qué se ha de considerar al no nacido en toda su dimensión de persona, ser humano independiente, con su código genético único. Lo cierto es que el Gobierno de España trata ahora de elevar a categoría de ley una ampliación del aborto que ni es demanda social ni siquiera atiende a códigos deontológicos médicos ni mucho menos a criterios científicos. Más bien al contrario, basta ver la ligereza con la que nada menos que una ministra se atreve a definir a un nasciturus como simple ser vivo (por cierto sin saber relacionarlo a ninguna especie) y le reniega su condición de ser humano. Esta afirmación, que debería ser motivo más que suficiente para que la ministra dimitiera por desconocer cuestiones que se aprenden en edad escolar, es la muestra de que en su carrera por la ley del aborto los miembros gubernamentales ya no saben ni qué decir.
El derecho a la vida es inherente a todo ser humano y los actuales avances científicos han dejado más que patente y demostrado desde cuándo hay una nueva vida. Negar esto es negar el rigor científico y a ello cabría sumar el testimonio del Dr. Nathanson, precursor del aborto en EEUU y que ha dirigido las clínicas abortistas más importantes del mundo. En la actualidad, Nathanson es ferviente defensor del niño aún no nacido y en su testimonio ha dicho que ha cometido una tremenda atrocidad por ganar dinero. Para muestra Nathanson nos ha legado vídeos reales de prácticas abortivas que él y su equipo llevaron a cabo, documentos visuales que -por cierto- las televisiones se niegan a emitir. Está claro que el debate sobre el aborto se podría cortar de un plumazo visionando estas cintas pero a los altos poderes no les interesa. El trasfondo del negocio económico y de intereses ocultos así lo exige. Mientras tanto, organizaciones como "Derecho a Vivir" siguen defendiendo a los más indefensos tal como recoge la Declaración Universal de los Derechos del Niño, la legislación internacional y hasta la Constitución Española. En este camino, se pide que se ayude a las madres que quieren tener a sus hijos, cosa a la que hace oídos sordos también la Junta de Andalucía que tira a la basura las firmas de apoyo recabadas. Lo que está claro es que todo el mundo puede interesarse por el testimonio del Dr. Nathanson a poco que lean sus documentos puramente científicos en internet.
