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Andalucía

Un Comisionado para la Concordia cambiará la Ley de Memoria Histórica

La Junta crea una nueva figura para "mejorar" un texto que va a intentar que se apruebe por "unanimidad", una medida que el PP pactó con Vox pero no con Cs

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  • Juan Bravo, nuevo consejero de Hacienda, y Elías Bendodo (derecha). -

El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha aprobado la creación de una Comisionado para la Concordia, que dependerá de la Consejería de Cultura, para impulsar una modificación de la actual Ley de Memoria Histórica “en busca de un mayor consenso”. Así lo ha anunciado el portavoz del Ejecutivo, Elías Bendodo, que ha insistido en que este Comisionado (que todavía no ha sido nombrado) “asume todas las competencias de la Dirección General de Memoria Histórica y todos los postulados de la ley”, para a partir de ahí trabajar “de forma tranquila y prudente pero con insistencia para que haya mayor consenso”.

Bendodo ha recordado que la actual ley “no es de consenso porque PP y Cs presentaron 70 enmiendas y no se aceptaron”, lo que llevó a ambos grupos a abstenerse. La idea ahora es “ampliar el campo de acción para desarrollar un nuevo texto legal para que todo el mundo se sienta identificado y representado”.

¿Significa esto que habrá recortes en la nueva ley, si sale adelante? “Asumimos al cien por cien los postulados”, ha reiterado, llegando a afirmar que “todo el mundo tiene derecho a saber dónde están enterrados sus familiares”. Eso sí, subrayó que esto requerirá calma y consenso.

La modificación de la Ley de Memoria Histórica se incluyó en el acuerdo suscrito entre PP y Vox para la investidura de Juanma Moreno como presidente, pero no se recoge en el pacto de gobierno rubricado con Cs. Pese a ello, Bendodo ha insistido en que lo que se busca es “ampliar” el actual texto. “Hay determinadas leyes en nuestro país que no se pueden aprobar por mayoría, tienen que aprobarse por consenso, es complicado pero merece la pena intentarlo”.

El objetivo es “que todo el mundo se sienta cómodo con el nuevo texto. Se asume al actual pero, como todo, es mejorable. Vamos a dejar que trabaje la consejera, que Comisionado se pongan en marcha, que hable con grupos parlamentarios…”. Se busca, en definitiva, un consenso que de partida parece complicado si se tiene en cuenta que habría que poner de acuerdo a dos bloques antagónicos (PSOE y Adelante Andalucía por un lado y Vox por el otro) en una cuestión extremadamente sensible.

El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha aprobado la creación de una Comisionado para la Concordia, que dependerá de la Consejería de Cultura, para impulsar una modificación de la actual Ley de Memoria Histórica “en busca de un mayor consenso”. Así lo ha anunciado el portavoz del Ejecutivo, Elías Bendodo, que ha insistido en que este Comisionado (que todavía no ha sido nombrado) “asume todas las competencias de la Dirección General de Memoria Histórica y todos los postulados de la ley”, para a partir de ahí trabajar “de forma tranquila y prudente pero con insistencia para que haya mayor consenso”.

Bendodo ha recordado que la actual ley “no es de consenso porque PP y Cs presentaron 70 enmiendas y no se aceptaron”, lo que llevó a ambos grupos a abstenerse. La idea ahora es “ampliar el campo de acción para desarrollar un nuevo texto legal para que todo el mundo se sienta identificado y representado”.

¿Significa esto que habrá recortes en la nueva ley, si sale adelante? “Asumimos al cien por cien los postulados”, ha reiterado, llegando a afirmar que “todo el mundo tiene derecho a saber dónde están enterrados sus familiares”. Eso sí, subrayó que esto requerirá calma y consenso.

La modificación de la Ley de Memoria Histórica se incluyó en el acuerdo suscrito entre PP y Vox para la investidura de Juanma Moreno como presidente, pero no se recoge en el pacto de gobierno rubricado con Cs. Pese a ello, Bendodo ha insistido en que lo que se busca es “ampliar” el actual texto. “Hay determinadas leyes en nuestro país que no se pueden aprobar por mayoría, tienen que aprobarse por consenso, es complicado pero merece la pena intentarlo”.

El objetivo es “que todo el mundo se sienta cómodo con el nuevo texto. Se asume al actual pero, como todo, es mejorable. Vamos a dejar que trabaje la consejera, que Comisionado se pongan en marcha, que hable con grupos parlamentarios…”. Se busca, en definitiva, un consenso que de partida parece complicado si se tiene en cuenta que habría que poner de acuerdo a dos bloques antagónicos (PSOE y Adelante Andalucía por un lado y Vox por el otro) en una cuestión extremadamente sensible.

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