Tras dos años de trámites, la empresa Espera Hidrógeno Verde SL ha presentado en sociedad el proyecto que pretende desarrollar en la comarca y que afecta a los términos de Espera, Bornos y Arcos.
Su representante en la zona, Francisco Ronda, junto a la técnico que ha elaborado el estudio ambiental, Amelia Olid, explicaba en el edificio Emprendedores y ante unas veinte personas los detalles de esta iniciativa industrial.
El proyecto generará hidrógeno con el uso de la energía fotovoltaica. Aunque la planta en sí esté en suelo espereño, la mayor parte del parque fotovoltaico se sitúa en término de Arcos. Afecta hasta catorce vías pecuarias. La planta podría generar alrededor de 21.000 toneladas al año, crearía entre 200 y 350 empleos durante su construcción y unos 70 fijos cuando esté operativa.
La empresa, que ya habría superado el periodo de exposición pública del proyecto, ubicará la planta en un área de 164.998 metros cuadrados, siendo la superficie vallada dentro de la misma de 120.088. El acceso a esta parcela se realizará desde la carretera que une las poblaciones de Bornos y Espera, y de la que parte un camino que da acceso directo a las futuras instalaciones, ubicadas concretamente a 2,7 kilómetros del núcleo de población de Espera y a unos 4,2 kilómetros de Bornos.
La firma estima que su hidrógeno tendrá una pureza superior al 99 por ciento y con una capacidad nominal de 352 megavatios. Además, se producirá un máximo de 167.666 toneladas al año de oxígeno, previéndose su descarga a la atmósfera.
En una primera fase se contempla la compresión del hidrógeno y el almacenamiento para su entrega a la red gasista que transcurre por la parcela de las instalaciones. En una segunda fase, la conexión a la red, produciendo también hidrógeno renovable.
Para la generación del hidrógeno verde mediante la electrolisis del agua, empleará el recurso natural procedente de las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) de Espera y Bornos. Adicionalmente, se plantea como salvaguarda ante posibles cortes en el suministro del agua la captación del arroyo La Saucedilla, para lo cual se está solicitando el cambio de uso de agua de 230.000 metros cúbicos al año (uso industrial) a una concesión de 320.000 que tienen otorgadas las parcelas ocupadas por la planta fotovoltaica y que no está en uso actualmente.
El agua será almacenada en una balsa de nueva construcción. Al detalle, se estima que el agua bruta necesaria para la alimentación a los electrolizadores asciende a 273.005 metros cúbicos al año, a los que habría que sumar los destinados a la limpieza de equipos, baldeos, servicios generales, limpieza de paneles y el consumo por el personal en servicios y vestuarios, elevando la cifra a 278.141 metros cúbicos al año. Según la documentación aportada por la empresa, se podría alcanzar un consumo puntual máximo de 92,13 metros cúbicos a la hora.
La empresa insiste en que la electricidad para el funcionamiento de la planta provendrá de las instalaciones fotovoltaicas proyectadas. En cualquier caso, garantiza que será de origen renovable. La potencia eléctrica máxima necesaria para atender las necesidades es de 357,4 megavatios.
Desde el Ayuntamiento de Arcos, su delegado de Urbanismo, Salvador Valle, destaca que todo proyecto que cumpla la Ley, que no contamine y suponga beneficios económicos para la zona contará con el beneplácito de la administración local, que así pone su granito de arena contra la descarbonización del planeta, señalaba el delegado.
