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Adecuación de la guardería Milagros Berenguer

El Ayuntamiento redistribuye las estancias del centro gracias a un acuerdo con la Mancomunidad de Municipios de la Sierra

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Imprimir un sentido más racional y funcional a las instalaciones de la guardería Milagros Berenguer es el objetivo que se marca el Ayuntamiento estos días en este servicio ubicado en el barrio de María Auxiliadora. Ya que se su gestión depende de la Mancomunidad de Municipios de la Sierra de Cádiz, se ha acordado con la institución comarcal que la mano de obra sea aportada por el Ayuntamiento y los materiales por la propia Mancomunidad; un acuerdo adoptado directamente con el equipo de Gobierno local por parte del presidente de la Mancomunidad, Juan María Nieto.

Estas tareas, dentro de los escasos medios económicos con que cuenta el Ayuntamiento, se corresponden con una demanda de los padres de alumnos, que hasta ahora estaban obligados a cruzar las dependencias de la guardería para acceder a otros servicios alterando los espacios infantiles. Con la obra ya en marcha se evitará estas incomodidades tanto a los menores como a los monitores y los padres.

A cambio de esta colaboración, la Mancomunidad irá acometiendo otras actuaciones en el municipio de las que ya irá dando cuenta el equipo de Gobierno, según avanzó ante los medios el delegado municipal de Infraestructuras, Manuel Garrucho, acompañado de la delegada del Barrio Bajo, Ana Fernández.

De otra parte, el Ayuntamiento continúa instalando badenes en el barrio a la espera de profundizar en esta actuación en otras zonas céntricas del municipio. Como ya se avanzó hace una semana, la idea es obligar a los conductores a rebajar la velocidad en determinados tramos para evitar un accidente, fundamentalmente en el entorno de los colegios e institutos.

Además, el Ayuntamiento se encuentra poniendo al día las infraestructuras y servicios en el Barrio Bajo pensando en la inminente nueva edición de la feria o velada del barrio.

Durante su encuentro con los medios, Manuel Garrucho admitió que con el nuevo Gobierno ha bajado el ritmo de obra pública, pero matizó que ahora se cumple los compromisos con los proveedores y las obras se ajustan a la realidad económica del Ayuntamiento.

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