Cádiz

El primer trasplante de útero podría ser realidad en dos años

El primer trasplante de útero podría ser realidad en dos o tres años, según anunció ayer el copresidente del Grupo IVI, Antonio Pellicer, quien ha abogado por la regulación legislativa de la subrogación de útero, la llamada madre de alquiler, como una posibilidad más de la reproducción asistida.

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Andaluc�a Informaci�n
El primer trasplante de útero podría ser realidad en dos o tres años, según anunció ayer el copresidente del Grupo IVI, Antonio Pellicer, quien ha abogado por la regulación legislativa de la subrogación de útero, la llamada madre de alquiler, como una posibilidad más de la reproducción asistida.

Pellicer hizo estas manifestaciones durante la presentación, junto al también copresidente del Grupo IVI, José Remohí, de un balance de los 20 años de vida del primer centro español dedicado a la reproducción asistida, y durante los cuales han conseguido más de 50.000 nacimientos, 20 clínicas repartidas en 8 países y “muchos avances médicos y científicos”.

“Uno de cada cien niños que nacen al año en España es gracias al IVI”, manifestó José Remohí, quien destacó que desde el año 1990 han sido más de 126.000 los pacientes que han confiado en esta entidad para “lograr su sueño de ser padres”.

Durante este tiempo ha cambiado el perfil de las personas que acuden al centro, y mientras hace veinte años iban “a escondidas” porque la reproducción asistida estaba “mal vista”, en la actualidad estos tratamientos se ven de “forma natural” y acuden mujeres sin pareja o lesbianas.

Respecto al trasplante de útero, Antonio Pellicer explicó que ya se ha realizado esta intervención en ovejas, ratones y ratas con resultados satisfactorios, y el salto a la especie humana podría darse en un periodo de dos a tres años.

La receptora “ideal” debería ser una mujer con agenesia uterina, que ha nacido sin útero, un problema cuya incidencia es de un caso por cada 100.000 personas, y la donante aquella cuyo útero no esté enfermo, ya que la edad no es un impedimento.

Esta intervención, que en el futuro podría realizarse en el Hospital La Fe de Valencia, podría acabar, según Remohí, con la utilización de la subrogación de útero, única posibilidad de tener su propio hijo genético a las mujeres que no tienen útero funcional.

Pellicer consideró que la subrogación de útero debería estar autorizada en España, e indicó que una forma “poco lesiva” y que podría evitar litigios sería que ésta se diera en la propia familia y una mujer se ofreciera para quedarse embarazada del marido de su hermana que no tiene posibilidad de hacerlo.

Remohí explicó que hay parejas españolas que en el extranjero están haciendo uso de madres de alquiler para tener un hijo, y ha agregado que en la legislación española “el problema es de conceptos, ya que señala que la madre del bebé es la que da a luz al niño”.

Uno de los objetivos de esta entidad es preservar la fertilidad para que el paso de los años no afecte a la calidad de los ovocitos, algo que, según Remohí, “no ha calado en la sociedad española, y son más las mujeres de otros países, como Israel, Reino Unido o Italia, que acuden a congelar sus óvulos”.

Se trataría de que todas las mujeres, y no solo aquellas que sufren un cáncer, tuvieran su propia reserva de óvulos vitrificados como un seguro de maternidad para poder ser madres en el momento que decidan, independientemente de su edad biológica.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN