Aún seguía llorando Jesús Navas cuando atendió a los medios de comunicación en la sala de prensa del Ramón Sánchez-Pizjuán. El capitán del Sevilla Fútbol Club, visiblemente emocionado, compareció tras la victoria frente al Celta de Vigo en el que será su último partido en el estadio de su vida.
Con muchas preguntas en el aire, una que parece traer de cabeza a la afición es quién heredará el dorsal del palaciego, número eterno y respetado por todo el sevillismo. Desde el triste fallecimiento de Antonio Puerta, el 16 se ha convertido en un símbolo para la afición blanquirroja, y Navas es consciente de lo que significa.
Cuestionado sobre este tema, el capitán sevillista fue tan franco como cabía esperar: “Quiero que quien se ponga esta camiseta se entregue como yo me he entregado. Este número es sagrado, igual que lo es Reyes. Este club es sagrado, este escudo es sagrado y esta afición es sagrada. Quiero que lo den todo, como yo lo he hecho hasta el último día, y creo que la idea la han cogido. Por lo que me quedo tranquilo en ese sentido”.
Juanlu Sánchez y José Ángel Carmona se postulan como los mejores candidatos para lucir el 16 de ahora en adelante. Ambos están asentados en el primer equipo, demostrando un nivel excelso esta temporada, y han crecido viendo a un Sevilla campeón que vuelve a necesitar del empuje de sus canteranos para regresar a la zona europea. Todo esto se verá a partir del 1 de enero, ya que a Jesús Navas aún le queda el Bernabéu.
