Publicidad Ai
Publicidad Ai

Huelva

La catástrofe de Aznalcóllar, una amenaza muy real para Riotinto

En información pública el nuevo proyecto de explotación de la mina de Riotinto, que permitiría el depósito de 161 millones de toneladas más de lodos

Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
  • Balsas mineras de Riotinto. -

Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra, pero en esta ocasión, ese tropiezo podría tener consecuencias devastadoras para la provincia de Huelva.

El 25 de abril de 1998, la presa minera de Aznalcóllar (Sevilla) reventó y provocó un vertido de entre cinco y seis millones de metros cúbicos de lodos y aguas ácidas que supuso uno de los mayores desastres medioambientales de Europa, una escena que podría volver a repetirse pero ahora en la provincia de Huelva.

Así lo advierte Ecologistas en Acción, que pone en el punto de mira la mina de Riotinto y la modificación sustancial del proyecto minero para estas instalaciones que ejecuta desde 2015 Atalaya Riotinto.

Se trata  de un nuevo proyecto de explotación que cuenta por ahora con el beneplácito de la Junta de Andalucía y que está en periodo de información pública hasta el 13 de septiembre.

En declaraciones a Viva Huelva, el grupo ecologista alerta de que ya de por sí la situación es peligrosa en la actualidad, pero si se consuma esta modificación se plantea el peor de los escenarios, pues implica un plan de residuos que supone la generación añadida de 161 millones de toneladas más de lodos en las presas.

La mencionada propuesta incluye un recrecimiento de 29 metros en la balsa Cobre, desde la cota 388 msnm (metros sobre el nivel del mar) hasta 417 msnm, y un recrecimiento de 42,2 metros en la balsa Aguzadera, desde la cota 374,8 msnm, también hasta 417 msnm.

Ecologistas considera “brutales” dichos recrecimientos, que “se realizarían sobre una vieja estructura de balsas que fueron construidas en los años 70, 80 y 90 por el peligroso método de aguas arriba, y que desde entonces no han parado de recrecerse”, y alerta de que esto es “exactamente lo mismo se hizo en Aznalcóllar”.

La clave, señalan, está en el alto riesgo de licuefación instantánea en las balsas por la “ausencia de espesamiento del vertido”, lo que aumenta el riesgo de rotura, como ya alertara el profesor Steven H. Emerman, de la Universidad de Utah (USA) en el informe ‘Análisis de riesgo de las presas de relaves en la mina de Riotinto’.

Este informe, previo a esta nueva modificación, advertía de que la falla de las presas debido a la licuefación en los próximos años “es casi inevitable”. Ahora el riesgo aumenta aún más, por lo que el profesor está inmerso en un nuevo estudio de riesgos.

Ecologistas lamenta que el nuevo proyecto “no impone ninguna condición de espesamiento previo de los lodos, por lo que se seguirá vertiendo con un contenido en agua del 66%, en contra de las recomendaciones que aconsejan reducir el contenido de agua hasta el 35%”.

Por ello, el grupo ecologista lanza un mensaje a la desesperada: “El riesgo de rotura sobrevuela las balsas mineras de Riotinto y eso provocará una ola de lodos tóxicos que arrasará la cuenca del río Odiel, pondrá en riesgo zonas pobladas de Gibraleón y Huelva, devastará las Marismas del Odiel y, tras desembocar en el mar, muy probablemente contaminará las costas de Doñana”.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN