El techo de La Magdalena se derrumba por su mal estado

Publicado: 10/01/2016
Los bomberos tuvieron que actuar ante un derrumbe cuya causa podría ser el mal estado de las vigas. Técnicos de la delegación de Cultura se trasladarán esta semana hasta la parroquia para evaluar los daños y realizarán un informe que emitirán al Obispado
La techumbre de la galería que rodea el patio de abluciones de la parroquia de La Magdalena se ha derrumbado y según los bomberos que intervinieron el pasado jueves, las causas están siendo investigadas.  Todo apunta a que las precipitaciones registradas la semana pasada y las fuertes rachas de viento han podido contribuir al desplome de parte de esta techumbre sujeta por vigas de madera y que en su conjunto no presenta un estado óptimo de conservación.

El incidente se registró sin que hubiera que lamentar daños personales. Los bomberos acotaron la zona para evitar riesgos ante posibles nuevos derrumbes. También intervinieron agentes de la Policía Local.
La parroquia permanece abierta al culto y no ha visto alterado su funcionamiento diario, aunque el acceso al patio de abluciones, como dependencia anexa, se encuentra clausurado, hasta que se reparen los daños ocasionados y que se han podido ver agravados por el temporal de este fin de semana.

Técnicos de la delegación territorial de Cultura se trasladarán esta   semana hasta la parroquia de La Magdalena para evaluar los daños registrados.

El patio es un anexo al templo y es una de las construcciones más antiguas de la ciudad.
El patio de abluciones pertenece a la antigua mezquita del siglo VIII construida por Abderramán II. Sobre la mezquita se levantó la parroquia de La Magdalena en el siglo XVI, lo que la convierte en una de las joyas arquitectónicas de la capital jienense, que aúna restos arquitectónicos romanos, musulmanes y cristianos. De hecho, la antigua mezquita se construyó sobre restos de época romana.

Desde la delegación de Cultura se sostiene que, aunque hace tiempo hubo una iniciativa para declarar la iglesia Bien de Interés Cultural (BIC), ésta finalmente no prosperó por lo que en la actualidad carece de esa figura de protección.

El edificio es propiedad del Obispado, pero ante la singularidad y su valor histórico, la Junta de Andalucía ha optado por enviar a sus técnicos par que evalúen los daños y elaboren un informe que será remitido al Obispado.

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