Jerez

La vendimia sigue bajo amenaza de huelga a una semana de su inicio

Las partes se verán las caras este miércoles ante el Sercla, en un ‘penúltimo’ intento de salvar la campaña

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  • Asamblea de trabajadores del sector de la vid. -

La vendimia sigue bajo amenaza de huelga cuando apenas resta ya una semana para su inicio en buena parte de los pagos del Marco de Jerez. Está previsto de hecho que las labores de recogida de la uva puedan más o menos generalizarse “a mediados o finales” de la próxima semana, estimándose que la producción se incrementará “entre un 10 y un 15 por ciento” con respecto al año pasado, según Francisco Guerrero, de Asevi-Asaja.

Pero todo ello va a depender en buena medida de la reunión prevista para este miércoles en el Sercla entre los representantes de los trabajadores y la patronal, ya que en caso contrario el mismo jueves 1 de agosto comenzaría una huelga general en el sector que se extendería a lo largo de toda la campaña.

Desde CCOO se recuerda que el año pasado ya hubo una amenaza de huelga que finalmente no llegó a materializarse, alcanzándose con posterioridad un acuerdo para la firma del nuevo convenio. Sin embargo, fue entonces cuando apareció “un nuevo escollo” que tiene que ver con la discriminación que existía hacia el personal temporal, algo que entienden resuelve la nueva figura del fijo discontinuo.

El caso es que el sindicato denuncia que la patronal no quiera reconocer la antigüedad a los temporeros, que tras la reforma laboral, deben considerarse ya como fijos discontinuos.

Guerrero se muestra esperanzado en que ambas partes puedan limar sus diferencias en el Sercla, ya que no cree a su juicio que existan “motivos tan importantes” como paralizar la actividad en el sector, recordando además que los viticultores vienen de años “muy malos” como consecuencia del bajo precio al que se había venido pagando la uva.

Más allá de esta incertidumbre, lo cierto es que la uva “está buena y madurando muy bien”, estimándose que la producción final cubrirá las necesidades de la campaña. El año pasado se molturaron 49,9 millones de kilos de uva y en esta ocasión se apunta a ese incremento de “entre el 10 y el 15 por ciento”, algo más moderado del que se hablaba a principios de verano.

El precio de la uva “es razonable” teniendo en cuenta los antecedentes, aunque según Guerrero algunas bodegas están ofreciendo “algo menos” que en la pasada campaña. Año pasado fue precio más que razonable para costes q tenemos en las viñas. “Las bodegas se quejan de que han pagado mucho, pero hay que recordar que estuvieron muchos años sin subir los precios, que es lo que debían haber hecho”, concluye Guerrero.

Una hipotética huelga apenas afectaría a la recogida en sí de la uva, que salvo contadas excepciones se realiza a día de hoy de manera mecanizada, pero sí que podría tener consecuencias tanto en el transporte de la misma a los lagares como en los trabajos posteriores de molturación. De ahí que el sector esté muy pendiente de la reunión que las partes tienen previsto llevar a cabo este miércoles ante el Sercla.

 

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