El creciente desarrollo de Gibraltar y la bahía, son motivos de seria preocupación para los ecologistas. Howitt detalla  las implicaciones para el Peñón de estas actividades.

—¿Qué tema prioritario afronta en estos momentos el Environmental Safety Group (ESG)?
—Nuestro grupo controla una serie de temas principales además de responder a situaciones que van surgiendo o de las que los ciudadanos nos informan. El calentamiento global y la necesidad de entrar en acción a nivel local son los asuntos prioritarios de la agenda, junto con la polución, el tráfico, el gasto de energía y la concienciación, áreas básicas de nuestro trabajo. Se puede encontrar información de nuestras campañas en la página web www.esg-gib.net

—¿Qué tipo de colaboración mantiene su grupo con el Gobierno para afrontar los problemas relativos al medio ambiente en Gibraltar?
—Nos reunimos regularmente con ministros del Gobierno y funcionarios, de cara a discutir nuestras preocupaciones sobre temas de salud y medio ambiente. El estudio epidemiológico y la campaña Clean up the World han sido los dos últimos en la agenda. El Gobierno de Gibraltar se muestra dispuesto a establecer la conexión a través de un estudio epidemiológico entre ciertas enfermedades y las fuentes de contaminación de la bahía. Agradecemos este compromiso y esperamos que el estudio ofrezca resultados concretos en 2009. El ministro de Medio Ambiente, Ernest Britto, se ha comprometido asimismo a avanzar en asuntos destacados por la campaña de limpieza Clean up the World, algo que catalogamos como muy positivo. Todo esto debe ahora igualarse con la puesta en marcha por parte de la administración de más recursos e inversiones. Nos gustaría contar con controladores de basura fijos, ver un incremento en las facilidades de reciclaje y disfrutar de una zona dedicada especialmente a la recogida de deshechos en Gibraltar.

—¿Cuál es el estado de las relaciones entre el ESG y los grupos medioambientales de la comarca vecina?
—Nuestro vínculo con los grupos del otro lado de la frontera siguen siendo fuertes, aunque en ocasiones tengamos diferentes estrategias y perspectivas sobre algún asunto específico. No siempre es posible mantener el 100 por 100 de la comunicación, como consecuencia de la presencia de la frontera, pero sí queda claro que tenemos que ir regularmente renovando nuestros contactos y trabajando juntos para la seguridad y salud de todos los ciudadanos de la bahía. La mayoría de los asuntos medioambientales más críticos son de naturaleza transfronteriza, por lo que resulta vital mantener estos vínculos.

—¿Para cuándo la depuradora de aguas residuales?
—Las plantas de tratamiento de aguas residuales son un requerimiento legal y es chocante que ciudades de la bahía como Algeciras y Gibraltar, entre otras, continúen vertiendo estos deshechos al mar. Estas acciones producen un desequilibrio en el medio ambiente natural y sólo viene a incrementar el riesgo de problemas de salud para la vida humana y marina, especialmente en los calurosos meses de verano. Según  el último manifiesto de GSD, el Gobierno se ha comprometido a construir una planta moderna en los próximos cuatro años. Asimismo se ha comprometido a reemplazar tres antiguas estaciones generadoras, construir una incineradora y un parque de recogida de deshechos. Todos los grandes proyectos requieren fuertes inversiones y dados los costes del programa del aeropuerto e infraestructuras de sus alrededores, uno sólo puede preguntarse cómo pretende Gibraltar financiarlos. Una vez más esperamos que la administración tome acciones importantes para invertir en energías verdes y renovables y que inste al uso de microtecnologías para apoyar el crecimiento y desarrollo en Gibraltar con sistemas de energía sostenible.

—¿Ha adoptado su grupo medidas para afrontar la expansión industrial y urbanística prevista para la zona de Eastern Beach?
—Cuando el proyecto fue anunciado el ESG fue a la oficina de planificación para examinar el proyecto y el estudio de impacto medioambiental. Expresamos nuestras preocupaciones, que eran muchas. Un proyecto de esta magnitud requiere fuertes inversiones y apoyo gubernamental y es muy difícil de frenar. Sin embargo, lo que vimos fue que todas las fases claves de la construcción estarían controladas con extremo cuidado para minimizar el impacto medioambiental. Este aspecto del proyecto  está siendo monitorizado por el Ministerio de Medio Ambiente.
Cuando el proyecto fue publicado pedimos al Gobierno que ampliara el período de consulta y que incluyera la información en su página web, ya que había que perder muchas horas en la oficina de planificación leyendo archivos, algo que la mayoría de las personas no pueden hacer en un día laboral. Por ello agradecimos la publicación del estudio de impacto de este proyecto en la web del Gobierno, al acceso de todos. ESG considera que todos los proyectos de envergadura, que tienen un impacto transfronterizo, deben emular esta práctica. Por ejemplo la expansión de la actividad industrial en los puertos de Algeciras y La Línea, el programa de ampliación de la refinería Cepsa, el bunkering y el aeropuerto de Gibraltar.

—¿En qué situación se encuentran en estos momentos las actuaciones de la Brigada del Cubo con respecto a la gran contaminación que se registra en la bahía preveniente del entorno petroquímico?
—Nuestra campaña de presión a las industrias para reducir la polución es continua. La Brigada del Cubo está integrada por organizaciones no gubernamentales voluntarias de ambos lados de la frontera. Una actuación específica como la de esta agrupación requiere un patrocinio considerable ya que los costes de los laboratorios son muy altos. Sin embargo, es una herramienta de campaña muy efectiva y espetamos seguir con el patrocinio en 2009 para tomar muestras independientes de aire tanto en Gibraltar como en España. Creemos que los resultados que obtuvimos en años anteriores ofreció a los grupos locales la munición necesaria para presionar tanto a Gobiernos como industrias para que redujeran los excesivos niveles de contaminación y aplicaran niveles de control del aire. Existe aún sin embargo mucho que hacer en este sentido.

—El Foro de Diálogo ¿ha abierto una posibilidad para mejorar la situación del medio ambiente en la bahía?
—Creemos que deberíamos aprovechar cada oportunidad disponible para influencias a cambios positivos en el medio ambiente de nuestra bahía. El Foro Tripartito es un proceso político que ha incluido una mención al medio ambiente en todas las declaraciones públicas hasta la fecha, aunque no se ha ofrecido ningún detalle, excepto quizás en temas marítimos. Esperamos que se pongan sobre la mesa los problemas marítimos, pero también es necesario discutir otros asuntos claves y entre ellos por supuesto la refinería de Cepsa y la necesidad de realizar una investigación independiente sobre la salud de los ciudadanos de la bahía, el bunkering, el reciclaje y asuntos de conservación. Junto con otras ONGs gibraltareñas y españolas, presentamos un detallado informe al reciente encuentro del Foro celebrado en Gibraltar, con información sobre estos temas críticos que nos afectan a todos en la zona.

—¿Es grave para el ESG la actual situación de accidentes navales que se están produciendo casi de forma continuada?
—Nosotros asumimos estos accidentes de una forma muy seria. Gibraltar se ha visto afectada una vez más por otro vertido, el de un buque inglés que aparentemente colisionó con una infraestructura de la refinería Cepsa, aunque la prensa española niega que el vertido en Gibraltar se originara con ese accidente. Con una bahía tan saturada, deberíamos contar con el nivel más alto de cooperación transfronteriza. Ya es hora de que los puertos de Algeciras y Gibraltar asuman el problema y pongan en marcha sistemas de control que al menos intenten frenar los accidentes. No deberíamos esperar a un desastre masivo para poner en práctica estas acciones o hallar soluciones a nivel político o internacional.

—¿Creen ustedes que existe una verdadera concienciación con respecto al tema medioambiental entre los ciudadanos de la zona?
—Hoy en día la concienciación es mayor pero existe un camino muy largo hasta lo que nosotros aspiramos. El futuro no mira demasiado bien para el medio ambiente. Muchas de las ciudades de la bahía viven de la refinería, acompañada por un complejo petroquímico, el incremento del bunkering, la industrialización de La Línea y la ampliación del puerto de Algeciras. Muchas de las zonas verdes se han sustituido por cemento. ¿Dónde está el desarrollo sostenible? ¿Dónde la planificación a largo plazo? Necesitamos un comportamiento más fuerte a nivel transfronterizo para controlar esta magnífica localización. Mientras que muchos estamos seriamente preocupados por las extremas condiciones del clima, la falta de urgencia que se refleja en el mundo del comercio y las sociedades consumistas que no piensan en el mañana, puede ser nuestra perdición.