Jerez

Unidos a las plantas de la Merced

Mamen Sánchez pide a la Patrona “una ciudad más próspera, con más empleo y justicia social”. Monseñor Mazuelos reclama “un gran pacto social” entre partidos e instituciones para poder afrontar la crisis “con fortaleza”

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Jerez celebró ayer la festividad de su patrona, Santa María de la Merced, con llamadas a la suma de esfuerzos y a la búsqueda del bien común tanto de la alcaldesa, Mamen Sánchez, como del obispo diocesano, José Mazuelos. Por lo demás, miles de jerezanos pasaron durante todo el día por la Basílica de la Merced, acompañando posteriormente a la patrona en su recorrido por las principales calles de la ciudad.
La regidora cumplió con el ancestral rito de renovar el Voto de la Ciudad a su patrona, un acto que este año preludió la celebración del solemne pontifical oficiado por monseñor Mazuelos. En su intervención, Sánchez pidió a la Virgen de la Merced “esperanza para una ciudad más próspera, con más empleo y con más justicia social”, unos objetivos para los que la Corporación municipal “trabaja cada día”.
En esta línea, la alcaldesa aludió a su “empeño” por “luchar contra las desigualdades”, advirtiendo de que la “base de la convivencia” debe sustentarse en el “respeto” y la “tolerancia” entre culturas, que son los “mayores tesoros de las sociedades libres”.
Monseñor Mazuelos agradeció la presencia de Mamen Sánchez en la Basílica de la Merced, recordando que la democracia actual “está cimentada en una tradición, en el Derecho Romano, la democracia griega y el humanismo cristiano”, de ahí que exista “un trozo del camino que nos une a todos, creyentes y no creyentes”.
En esa línea, el obispo demandó “un pacto social, por el bien de la ciudad”, que permita “afrontar la crisis con fortaleza” y que incida fundamentalmente en el problema del desempleo. “Eso sólo es posible con un pacto social de unidad de todas las fuerzas políticas e instituciones, y eso es lo que hoy pido a la Virgen de la Merced”, concluyó.

Con la ausencia del templete
A las seis y media de la tarde se puso en marcha la procesión de la patrona, que este año salió a la calle desprovista de su templete en una llamada de los mercedarios a la colaboración de los jerezanos con las obras que actualmente se ejecutan en la basílica. En el cortejo se integraron representaciones de las hermandades y cofradías, así como de congregaciones religiosas, organizaciones de carácter civil y la Corporación municipal.
En el primer tramo del recorrido se colocaron vistosas alfombras de sal coloreada, en una iniciativa que llevan a cabo de unos años a esta parte los grupos de jóvenes de las hermandades de la ciudad. n

 

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