Un autobús urbano de la línea 8, modelo Iveco, que cubría su ruta por Cuatro Caminos como cualquier día más salió ayer ardiendo cuando pasaban las cuatro de la tarde, en un espectacular y aparatoso incendio que afortunadamente no provocó daños personales pues minutos antes iba ocupado por 14 pasajeros. Fueron estos últimos los que alertaron al conductor cuando en un momento dado empezaron a oler a quemado y comenzó a salir humo de la parte trasera del vehículo de transporte público.
Rápidamente, el chófer lo detuvo y puso a salvo a los pasajeros, que se resguardaron en el interior de una nave de disfraces, ya que los cristales del autobús comenzaron a romperse a causa de la combustión en el interior del habitáculo. Acto seguido, el conductor intentó sofocar las llamas con un pequeño extintor de mano hasta que le fue imposible continuar porque fueron a más en cuestión de segundos y tuvo que retirarse por su propia seguridad.
“La verdad es que ha sido un susto”, señalaba un vecino que captó las imágenes desde la ventana de su casa, y que dio cuenta también de la preocupación que había en la calle por la cercanía de una gasolinera al lugar del suceso. “La verdad es que los bomberos y la Policía han tardado en llegar”, dijo. Cuando llegaron, de hecho, en la zona había una columna de humo negro y las llamas devoraban al autobús.
Fueron los propios pasajeros los que habían dado aviso una vez en la calle al 112. La envergadura del fuego obligó además a la Policía Local a cortar el tráfico en la zona, lo que ocasionó retenciones en este enclave. Hasta el lugar de los hechos también se trasladó el propio teniente de alcaldesa de Movilidad, José Antonio Díaz, para interesarse por lo ocurrido.
Tras evaluar el alcance de los daños materiales, que se traducen en un autobús completamente calcinado, Díaz destacó “la pericia del chófer” para evitar que se produjeran daños personales desalojando rápidamente el vehículo, a pesar del “aparatoso susto”.
Un problema “recurrente”
En cuanto a las causas, por el momento se desconocen, lo único que está claro es que hubo un “fallo en el motor” (que fue donde se generó el fuego), señala Díaz, un problema “recurrente” entre los 29 autobuses de la marca Iveco que el Gobierno local del PP de María José García-Pelayo “trajo a Jerez”. En este sentido, el titular de Movilidad en el Ayuntamiento de Jerez aseguró que con este son ya tres los incendios que se han producido en autobuses desde 2012 en adelante.
El afectado, en concreto, tiene más de 15 años de antigüedad “pero no es de los más antiguos”. Díaz además recuerda que la llegada de los nueve nuevos autobuses de una flota muy castigada por el mal estado de los vehículos está prevista para agosto. Lo que está claro es que más de uno de los pasajeros que ayer vivieron este susto se lo pensaran dos veces hoy si tienen que volver a montarse en un autobús para sus desplazamientos.
