Socialistas y liberales denuncian que se siga hablando de nuevo clima en las relaciones
La oposición de Gibraltar asegura que “los rumores de que las aguas de Gibraltar van a ser nuevamente incluidas en otra designación de la UE, tras ser propuestas por España, es un asunto muy serio”.
Añade que este punto viene a confirmar la postura de socialistas y liberales del Peñón relativo a que el tema estaba lejos de solucionarse cuando el ministro español de Exteriores visitó Gibraltar el pasado mes de julio.
Recuerda la coalición en oposición que Caruana señaló en el Parlamento durante la ceremonia de investidura del nuevo gobernador, que “la Comisión Europea tenía previsto emitir una nueva decisión sobre los Lugares de Interés Comunitario, incluyendo nuevamente uno designado por España en nuestras aguas”. Prosiguió el ministro principal, añadió ayer la oposición, realizando un llamamiento al Reino Unido para que se tomaran acciones legales contra la Comisión por esta situación.
“Sin embargo, Caruana no comentó lo que esta segunda designación refleja sobre la actitud española”, matizan socialistas y liberales, quienes vuelven a insistir en la preocupante etapa que se viene viviendo en las aguas que rodean al Peñón desde que en diciembre del 2008 la Comisión designara como españolas parte de ellas, otorgándole así cierta responsabilidad sobre la zona.
Por lo tanto, para la oposición conocer que existe una nueva decisión sobre Lugares de Interés Comunitario “que incluye uno solicitado por España en aguas de Gibraltar, sólo puede servir para añadir insultos al daño ya realizado”.
Para la coalición es importante que el Reino Unido tome acciones para defender la soberanía de sus aguas y lo es también cuestionar la motivación de España al realizar esta nueva propuesta de LIC tras los problemas creados con la anterior.
Actitud de Madrid
A la vista de la oposición “es totalmente inaceptable que nos sigan diciendo que existe un nuevo clima en las relaciones entre Gibraltar y España cuando al mismo tiempo Madrid continúa embarcándose en actos agresivos de esta naturaleza contra el Peñón”.
“El Gobierno español debe comprender que sus deseos de buena fe y amistad hacia Gibraltar sólo pueden ser juzgados por sus acciones y no por sus palabras. Esta segunda designación de nuestras aguas como si les pertenecieran a España es indignante y en plena contradicción con la propaganda de buenas relaciones entre los gobiernos de España y Gibraltar”, concluyen socialistas y liberales.
