Málaga

Alarma desde Cáritas: Seis de cada diez personas atendidas son trabajadores o pensionista

La subida de los precios de los suministros, los alimentos y la vivienda “han cambiado” el rostro de la pobreza.

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  • Balance del año 2023. -
  • La situación de la vivienda es “caótica” en la provincia, porque “no hay políticas que se preocupen por promover la vivienda social”.
  • Las personas que acuden a Cáritas tienen rastro femenino, más del 71,56 por ciento son mujeres.
  • El 57,9 por ciento son migrantes y el 33,4 por ciento lleva más de tres años acudiendo.

La subida de los precios de los suministros, los alimentos y la vivienda “han cambiado” el rostro de la pobreza. Seis de cada diez personas atendidas por Cáritas son trabajadores o pensionistas con escasos ingresos. La organización ha presentado su balance del 2023, año en el que han atendido a más de 24.000 personas en Málaga. La situación de la vivienda es “caótica” en la provincia, porque “no hay políticas que se preocupen por promover la vivienda social”, ha alertado el delegado episcopal, Antonio Collado, quien ha explicado que “hay personas con dos sueldos que no pueden sacar adelante a su familia”.

Hay personas con dos sueldos que no pueden sacar adelante a su familia.

Muchas personas están “sobreviviendo en condiciones precarias y con el miedo a no poder llegar a fin de mes”, ha añadido el director de Cáritas, Francisco José Sánchez: “Es un nuevo perfil de pobres”. El incremento del coste de la vida ha “impactado de manera fuerte en aquellos que pasan más dificultades”. Los pensionistas y trabajadores “viven atrapados en la precariedad”, porque “no es que no tengan ingresos”, sino que el 48 por ciento de las personas que acuden a Cáritas en búsqueda de ayuda realizan alguna actividad laboral, “pero, aún así, los ingresos o pensiones que perciben son tan bajas que no les permiten cubrir las necesidades básicas” y vivir “dignamente”.

Las dificultades para hacer frente al pago de la vivienda alcanza a casi la mitad de las personas atendidas. En concreto, han manifestado este problema el 47,3 por ciento. El aumento de personas que viven en habitaciones realquiladas y, en buena parte de los casos, compartidas, suponen ya el 19,9 por ciento del total. “Las familias más pobres gastan seis de cada diez euros en alquiler o hipoteca”, ha informado Sánchez, y la “mitad de las personas no pueden hacer frente al pago de la vivienda”. Esta situación está “forzando a muchas familias a situaciones de hacinamiento”.

En cuanto al perfil, las personas que acuden a Cáritas tienen rastro femenino, más del 71,56 por ciento son mujeres, porque son ellas las que “suelen dar el paso para sacar adelante a la familia”. El 57,9 por ciento son migrantes y el 33,4 por ciento lleva más de tres años acudiendo a la organización. Desde Cáritas muestran preocupación por la “cantidad” de personas que “intergeneracionalmente” les piden ayuda: “Fueron atendidos sus padres, sus hijos y ahora son los nietos lo que también, en algunos casos, vienen. La trasmisión de la pobreza hay que romperla”.

En los últimos cinco años, el número de personas migrantes acompañadas ha aumentado un 14 por ciento. Además, el 43 por ciento se encuentra en una situación administrativa irregular. En apoyo de estas personas, ha detalldo, Cáritas Diocesana ha colaborado con la recogida de firmas para conseguir la consideración de la Iniciativa Legislativa Popular en el Parlamento para la regularización extraordinaria de personas migrantes.

A través de los servicios de acogida y acompañamiento de las Cáritas, en 2023 se han acompañado a 8.722 personas, una cifra muy similar a la de 2019 (8.856). Gracias a este acompañamiento, se han visto beneficiadas 20.638 personas, que han recibido un total de 54.407 ayudas. En programas, proyectos y centros han participado 4.106 personas, 2.186 en las Cáritas parroquiales (más de 31 proyectos) y 1.920 en los Servicios Generales.

El 36 por ciento de las personas atendidas han acudido a Cáritas por primera vez. El dato más esperanzador se encuentra en el 22,7 por ciento que ha conseguido mejorar su situación. Refiriéndonos a las unidades familiares, podemos decir que se han acompañado 8.003 hogares con realidades muy distintas. Cabe destacar que el 36,7 por ciento de ellos están formados por parejas con hijos, el 20 por ciento por familias monoparentales y el 12,8 por ciento por personas solas.

Entre los principales problemas detectados en las personas que han acudido en busca de ayuda, el 86,74 por ciento de las personas atendidas han solicitado ayuda para cubrir necesidades básicas, mientras el 81,30 por ciento ha manifestado tener diferentes dificultades relacionadas con el mundo del empleo.

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