Málaga

Una basílica para la Señora

Se cumplen 30 años desde la consagración del templo del Paso y la Esperanza, un regalo a la Virgen con motivo de su coronación canónica, ocurrida en 1988

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  • La llegada a Málaga de El Corte Inglés modificó la ubicación de la que hoy conocemos como casa hermandad ‘esperancista’
  • Lugar de culto, salón de tronos y sede social componen este complejo urbanístico perteneciente a la Archicofradía perchelera

Un acontecimiento histórico religioso y un hito urbanístico  se dieron la mano en la ciudad de Málaga en los años 80: por un lado, la coronación canónica de la Virgen de la Esperanza y paralelamente la construcción de la basílica que lleva su nombre. Esta historia comienza con el anuncio por parte del entonces Ministerio de Obras Públicas de dar un nuevo acceso al puerto de Málaga a través del pasillo de Guimbarda, del Pasillo de Santo Domingo y de parte del río Guadalmedina. Aunque finalmente este proyecto no se ejecutó, en esa información pública se contemplaba la expropiación de parte de la iglesia de Santo Domingo, concretamente la capilla de la Archicofradía perchelera. “Eso es lo que obligó  a la cofradía a ponerse las pilas y adelantar un proceso por el que hacerse las cosas, es decir, buscar un solar, por descontado en el barrio de El Perchel, donde la cofradía pudiera erigir su casa hermandad y su iglesia”, explica Carlos Ismael Álvarez, exhermano mayor esperancista que en aquellos años ocupaba el cargo de teniente hermano mayor, que añade que el solar en el que actualmente se levanta el templo no era el que originariamente  se cedió para tal fin.

"Se coronó en la plaza de la Constitución porque queríamos que participara el mayor número de personas”

Las negociaciones corrieron a cargo del entonces hermano mayor e insigne malagueño, Carlos Gómez- Raggio, quien consiguió la cesión de una parcela en el ‘Polígono de la prolongación’ (lo que hoy conocemos como Avenida de Andalucía) de unos 700 metros cuadrados. Ese espacio ya pagado por la cofradía tuvo que utilizarse para la construcción de El Corte Inglés porque lo que la Esperanza fue compensada con el terreno actual situado en la trasera del famoso centro comercial. “Aquello fue un hito, en la rehabilitación del barrio y en mantenerlo vivo”, culmina.  Fue un hito que se vio culminado con su consagración el día 4 de junio de 1988 pero la terminación de ese complejo cofrade y social, que ya se había empezado a construir mucho años antes, se fue dilatando para poder ofrecer el templo como regalo a la Virgen de la Esperanza con motivo de su coronación canónica, ocurrida el 18 de junio (Festividad de los Santos patronos Ciriaco y Paula) del mismo año. Es decir, sólo 14 días después.

Aquella ceremonia tuvo lugar en la plaza de la Constitución, en el corazón del Centro Histórico de la ciudad, “porque queríamos que participara el mayor número de personas posibles y la Catedral es muy grande pero tiene sus limitaciones”. Quien firma estas palabras es José Luis García Doblas, ideólogo del altar en el que tuvo lugar la eucaristía, que alcanzó una altura de 14 metros y que se colocó en el lateral este del citado enclave. El objetivo es que fuera un acto “muy participado” y se consiguió: sólo en la plaza se congregaron 4.000 personas. Ese día se hacía realidad un anhelo que albergaba en el corazón de la cofradía desde hacía muchos años. Ya en el año 80 se iniciaron los trámites para este reconocimiento eclesiástico siendo hermano mayor el citado Gómez-Raggio. Manuel Narváez, que le sucedió como máximo responsable  y ocupaba el cargo cuando todo esto ocurrió, explica que “la Virgen de la Esperanza, con el cariño que se le tiene en Málaga y fuera de Málaga, tenía que ser una virgen coronada”. Y lo fue y de eso han pasado ya 30 años.

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