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La nieve y los fuertes vientos mantienen al país en alerta

El temporal de nieve y viento que mantuvo ayer en alerta a todo el país ha dejado varios heridos leves, obligó a suspender las clases en Cantabria y están aún causado cuantiosos daños materiales.

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  • El oleaje rompe sobre la península de La Magdalena, en el puerto de Santander. -
El temporal de nieve y viento que mantuvo ayer en alerta a todo el país ha dejado varios heridos leves, obligó a suspender las clases en Cantabria y están aún causado cuantiosos daños materiales. 

Según la dirección general de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior, dieciséis comunidades autónomas están en aviso por nieve, viento o fenómenos costeros (oleaje fuerte). 

La nieve dificultó ayer la circulación en prácticamente toda España, aunque los mayores problemas se registaron en las carreteras de la mitad norte del país. 

La Dirección General de Tráfico cerró el tráfico en el puerto de La Ragúa (Granada) y obligaba ayer a usar cadenas en una decena de puertos de montaña de la red principal. 

Además, a primera hora de la mañana, la nieve caída durante la noche del miércoles al jueves obligó a cerrar el tráfico de vehículos pesados por la autopista del Huerna (A-66), la principal vía de comunicación entre Asturias y la Meseta. 

Y en Palencia, los 630 habitantes de unos veinticinco pequeños pueblos del norte de la provincia quedaron aislados a causa de la nieve que se acumula en las carreteras y unos 120 camiones fueron retenidos durante toda la mañana en la A-67 entre Aguilar de Campoo y Osorno. 

No obstante, lo peor del temporal están siendo los fuertes vientos, que cruzan la península con rachas de entre 90 y 120 kilómetros hora. 

El viento ha superado los 120 kilómetros por hora en Asturias, Cantabria, Baleares y el País Vasco; los 100 kilómetros hora en Andalucía, Aragón, Cataluña, Navarra, La Rioja, la Comunidad Valenciana, las dos Castillas y Ceuta; y los 90 kilómetros hora en Extremadura, Murcia y Melilla, según Protección Civil.

Herido grave en Baleares 

El hombre caído al mar en la tarde de ayer en el puerto de Palma, al desplomarse una pasarela que unía la terminal de pasajeros con un crucero anclado en un muelle, es un anciano de 80 años y nacionalidad egipcia que se encuentra ingresado en estado grave con ventilación mecánica. 

Según un parte médico de la clínica Palmaplanas, adonde fue trasladado, el paciente responde a las siglas J.F.N. y está ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). 

El hombre está grave y con pronóstico reservado, se encuentra bajo sedación, con ventilación mecánica y hemodinámicamente estable, detalla el parte. 

El pasajero, que en ese momento cruzaba la pasarela del crucero, se hirió al caer al agua y golpearse con el casco del buque.

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