El movimiento islamista Hamás advirtió hoy al nuevo presidente de EE.UU., Donald Trump, de que no traslade la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén porque significaría "cruzar todas las líneas rojas".
"Advertimos de los peligros de mover la embajada estadounidense de Tel Aviv a la Jerusalén ocupada", dijo el movimiento islamista en un comunicado difundido hoy en Gaza.
Para Hamás, que hasta ahora se opone formalmente a cualquier arreglo con Israel, "la Administración estadounidense cruzaría todas las líneas rojas con el traslado de la embajada".
El posible traslado, que Trump anunció durante la campaña electoral, fue uno de los asuntos del que ayer habló el nuevo presidente con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en una conversación telefónica a última hora del día.
Ayer, fue el presidente de la ANP, Mahmud Abás, el que dirigió a Washington un mensaje de advertencia, según el cual se tenían preparadas una serie de medidas en caso de iniciar el traslado.
Abás habló a los medios en Amán, después de reunirse con el rey Abdalá II de Jordania, quien se comprometió a apoyarle para bloquear los planes del mandatario estadounidense en ese sentido.
A comienzos de enero, Abás aseguró que instalar la embajada estadounidense en Jerusalén supondría una "agresión" y cruzar una "línea roja" inaceptable.
Aunque Israel considera Jerusalén su capital, ningún país tiene su embajada en esa ciudad y todas se ubican en Tel Aviv o en localidades cercanas, ya que la comunidad internacional rechaza la ocupación y posterior anexión de la parte este de la ciudad.