Mundo

Guaidó tira una moneda al aire y le sale cruz

Los militares no atendieron el llamamiento que hizo Guaidó a la Fuerza Armada para que dieran la espalda a Maduro

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
  • Guaidó. -

La oposición venezolana lanzó una moneda al aire y salió cruz, con el llamamamiento que hizo a la Fuerza Armada el jefe del Parlamento, Juan Guaidó, para que diera la espalda al gobernante Nicolás Maduro y que los uniformados no atendieron.

Guaidó despertó a los venezolanos cerca de las 6.00 horas locales (10.00 GMT) con un mensaje a través de las redes sociales en el que les pedía salir a manifestarse para deponer a Maduro, mientras que a los militares les exigía unirse a su causa.

"La familia militar de una vez dio el paso. A todos los que nos están escuchando: es el momento, el momento es ahora, no solo de la calma sino del coraje y la cordura para que llegue la calma a Venezuela", dijo Guaidó acompañado de una veintena de militares y del líder de su partido, Leopoldo López, quien burló el arresto domiciliario para sumarse a las protestas.

Pero su llamada no fue escuchada por los militares, que hoy permanecieron leales a Maduro, quien no apareció en público y dejó sin arengas a los miles de simpatizantes que se acercaron al palacio presidencial de Miraflores, adonde acudieron para ratificarle su respaldo.

Efe constató que hubo enfrentamientos entre militares leales a Maduro y el grupo de funcionarios que respaldaba a Guaidó en las cercanías de la base aérea de La Carlota, que los alzados tomaron y luego abandonaron.

El ministro de Defensa de Maduro, Vladimir Padrino López, rechazó la apuesta de Guaidó, que no dudó en calificar como "golpista", al tiempo que reportó "normalidad" en los cuarteles del país.

"Nos mantendremos firmes en defensa del orden constitucional y de la paz de la república, asistidos como estamos por la ley, la razón y la historia ¡Leales Siempre, Traidores nunca!", remarcó el alto funcionario.

Y el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, aseveró a media tarde que estaban "completamente derrotados los golpistas" en Venezuela.

"Huyendo a embajadas, escondidos, nadie da la cara, solo el imperialismo (Estados Unidos) sale buscando excusas ¡Nosotros venceremos!", dijo en Twitter.

Con todo, la petición de protestas callejeras de Guaidó sí fue escuchada por miles de caraqueños, que se congregaron en el acomodado barrio de Chacao -un bastión opositor-, donde se registraron enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas del orden público.

Responsables de la Cruz Verde, un grupo de paramédicos de la Universidad Central de Venezuela, dijeron a Efe que atendieron en la zona de Altamira a 10 personas heridas, una de ellas por impacto de bala en el pie derecho.

En tanto que el servicio de asistencia sanitaria de Chacao informó de que al menos 69 personas resultaron heridas durante toda la jornada de violentas protestas antigubernamentales, que se mantenía hasta cerca de las 19.00 horas locales (21.00 GMT), según el alcalde Gustavo Duque.

Por momentos la violencia entre manifestantes y los equipos antimotines fue tal que una tanqueta de la GNB arrolló a varias personas, de las cuales no se tuvo mayor información.

El propio Guaidó acompañó estas protestas durante la mañana, pero luego partió junto a López rumbo al oeste de Caracas, que se mantuvo en relativa calma este martes, y finalmente su paradero fue desconocido, aunque un miembro de su equipo informó que estaba "bien".

López, por su parte, entró junto a su familia en calidad de huésped a la embajada chilena en Caracas, que luego abandonó para trasladarse a la de España según el canciller de Chile, Roberto Ampuero, mientras que el paradero de Guaidó era desconocido.

Entretanto, unos 25 militares, que se pronunciaron junto a Guaidó en la madrugada, solicitaron refugio a Brasil.

Venezuela atraviesa un alto pico de tensión política desde enero pasado, cuando Maduro juró un nuevo mandato de 6 años que no reconocen la oposición y parte de la comunidad internacional, y Guaidó proclamó un Gobierno interino que cuenta con el respaldo de más de 50 países.

En paralelo, la nación petrolera sufre la peor crisis económica de su historia, lo que genera cada día protestas para denunciar la severa escasez de alimentos y medicinas y la pésima prestación de los servicios públicos.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN