La asociaciones WWWF y Ecologista en Acción han criticado las "prisas" de la Junta de Andalucía para reabrir el yacimiento minero de Aznalcóllar (Sevilla), después de que esta martes el Consejo de Gobierno haya aprobado el Decreto ley que permitirá la reapertura mediante concurso público, al tiempo que instan al Ejecutivo andaluz "a establecer un pliego de condiciones" con unas bases que "salvaguarden" el medio ambiente y "protejan" el Guadiamar.
Así, y en declaraciones a Europa Press, el coordinador de Doñana de WWF, Felipe Fuentelsaz, ha señalado que "lo primero que les preocupa es la rapidez con la que la Junta ha movido este tema y las prisas con las que ha sacado este decreto", toda vez que le recuerda "si éste es el modelo de desarrollo sostenible que quieren promocionar en el entorno de Doñana". "A todo el mundo nos viene a la cabeza el accidente de Aznalcóllar, ocurrido en 1998, y la problemática con la recuperación y la restauración del Guadiamar".
En este sentido, Fuentelsaz ha querido recordar al Ejecutivo andaluz que el Guadiamar "es una de las principales arterias que dan vida al Oriana", y que, además, en este afluente "se ha invertido mucho dinero público para que actualmente se sitúe como un ejemplo de corredor verde". Por tanto, "nos preocupa que la Junta vuelva a intentar convertir al Guadiamar es un desagüe de las minas" y entienden como un "error terrible" para el desarrollo de modelo sostenible, que "se pueda repetir la misma historia".
"Aparte de todo el dinero de inversión pública invertido en el corredor verde, también se ha invertido en el polígono de Aznalcóllar un dinero par una serie de actividades, que es un error sobre el que tendrán que asumir sus responsabilidades y volver a enfocar. Pero reabrir de nuevo una mina, con el impacto directo que tiene sobre Doñana, nos parece un poco peligroso", afirma Fueltelsaz, que insiste en que "son conscientes" de la dificultad socioeconómica de la zona, pero lamenta "el paso atrás en cuestiones ambientales y de sostenibilidad" y el "error" en el enfoque de la Junta al respecto.
Por su parte, el responsable de Minas de Ecologistas en Acción, Antonio Ramos, ha dicho, en declaraciones a Europa Press, que les "asombra" que "se saque a concurso la posible explotación de la mina sin unas condiciones de trabajo y sin una base de la explotación", ya que las declaraciones apuntan a que "el ofertante va a imponer condiciones, y el que menos imposiciones tenga será al que le den la concesión", un extremo que califican de "demencial".
En este sentido, señala que con independencia de que "haya que cumplir" el reglamento de minas, la ley de aguas y el Reglamento del Dominio Público Hidráulico, la Junta "tiene jurídicamente la capacidad para establecer un pliego de condiciones", en el que se establezcan unas bases y "quien se comprometa a cumplirlas entre en el concurso", porque la apertura de la mina tiene que "salvaguardar el medio ambiente" y "proteger" el Guadiamar, que "es el único aporte de aguas fluviales a Doñana, cuya limpieza ha costado muchos millones de euros para que ese trabajo se quede en agua de borrajas".
"ES UNA SOBERANA TONTERÍA DECIR QUE HABRÁ 1.500 TRABAJOS"
"Una empresa minera va a sacar el máximo beneficio en el menor tiempo posible sin tener para nada en cuenta el daño que pueda hacer al medio ambiente". Además, asegura que todo aquello que "no vaya acompañado de unas medidas paralelas que creen empresas para desarrollar un trabajo posterior a la clausura de la mina es para nada", toda vez que dice que "es una soberana tontería" decir que se van a crear 1.500 puestos de trabajo, lo que, a su juicio, "demuestra, lo haya dicho quien lo haya dicho, el desconocimiento de qué es la industria minera".
Por último, Ramos ha recordado que tras conocerse de intención de la Junta de volver a explotar la mina de Aznalcóllar, Ecologistas en Acción hizo una propuesta "seria y razonada" a la directora general de minas, María José Asensio, "sobre cómo ha de hacerse la explotación, y no ha habido respuesta, solo que se estudiaría", lamenta.
