Con la miel en los labios. Así está el sector de la moda flamenca, al que en esta semana pretendían dar oxígeno mediante diferentes actividades, la más importante, un desfile por la Avenida de la Constitución que ha quedado aplazado debido a la situación sanitaria. La ilusión de estos artesanos se ha vuelto a desplomar mientras el tiempo para decidir si iniciar o no la nueva colección, se agota.
Para intentar de aliviar la cruz con la que cargan estos artesanos de la moda, el Ayuntamiento preparó una serie de actividades para llenar de lunares y de moda flamenca las calles del centro de Sevilla. “Dentro de lo poco que hemos tenido, si lo poco que tenemos se nos cae… pues no nos ayuda mucho. Ha sido una ilusión pasajera, estábamos en marcha y no hemos podido ni hacer las pruebas”, insiste Ángeles Verano, una de las diseñadoras de moda más prestigiosas del panorama actual, quien se ha pronunciado sobre el desfile suspendido alegando que cree que no lo entiende “muy bien del todo, porque un desfile con aforo limitado, al aire libre, con las sillas separadas, francamente no creo que hubiera habido ningún problema, pero el Ayuntamiento ha decidido curarse en salud.” Alejandro Santizo es otro de los diseñadores más aclamados y afamados de la moda flamenca actual, quien se muestra más escéptico con estos desfiles en los que no iba a participar “porque llevamos dos años con la ultima colección y he hecho más colaboraciones que ningún año y no quería seguir moviendo los vestidos sin tener ganancias”, explica Santizo.
Lo que necesita este sector son ayudas directas y es lo que siguen esperando. “Las ayudas que tenemos son de publicidad, que están muy bien, pero no son las que necesitamos, sinceramente. El sector está agonizando”, sentencia Verano, una diseñadora que lucha junto a otras plataformas para el reconocimiento de un sector que como explica Alejandro Santizo, “no tiene un epígrafe que lo distinga y si no hay epígrafe, no se nos pueden dar ayudas. Llevamos meses con la puesta en marcha de este epígrafe y supuestamente era algo rápido, pero ya vemos que no.”
La cara buena de la moneda la han dado iniciativas como los
stands promovidos por el Ayuntamiento en la Plaza Nueva y alternativas como el
showroomfomentado por Patricia Nakib del blog “De flamencas y volantes”, en el que como narra Santizo, “en cuatro días, 13 diseñadores vendimos más de 120 vestidos y yo lo vendí todo. Está mal vendido, pero al menos recuperamos los ingresos.” Esta iniciativa junto a las exposiciones realizadas en el Círculo Mercantil y el Ayuntamiento, dan vida a la llama de unos lunares que se están apagando como indica el nombre del movimiento LUNAROFF, creado a raíz de la pandemia y que tal y como manifiesta Ángeles Verano, “junto a MofAnArt y otras plataformas, se han preocupado lo más grande porque podamos salir adelante y es necesario recalcar su labor”.
Sin embargo, una labor que estos diseñadores critican es la del Ayuntamiento, de quien esperaban “algo más constructivo porque los desfiles no nos ayudaban en nada, al menos a mi; es reajustar y ensuciar los trajes para no verle ningún tipo de beneficio”, apostilla Santizo. Ángeles Verano cree que “el Ayuntamiento lo hizo con la mejor intención y al final ha habido que posponerlo y no sabemos cuando se volverá a hacer” añadiendo que si se tiene que quedar con algo, es con el homenaje a los héroes de la pandemia con “todas las mujeres que han estado en primera línea y al menos la gente puede disfrutar de las fotografías; ha sido algo muy entrañable y bonito.”
Estos mismos sectores son los que llevan realizando desde días atrás un llamamiento para que las mujeres se vistan de flamenca y se paseen por el centro de Sevilla para reivindicar también el traje de flamenca, algo que agradece también Santizo debido que han recibido “mensajes de muchísimo animo y espero que haya flamencas, muchas flamencas por parte del público.”
Alejandro Santizo, alega que este sector se encuentra en “una situación crítica”, sobre todo psicológicamente porque “como caigamos, a ver quién nos levanta ya que tenemos muchísimos gastos y aún hay quien tiene facturas a deber.” Ángeles Verano por su parte recalca que de cara al futuro, el de la moda flamenca “es un sector con muy poco tiempo de reacción porque en verano nos deberíamos meter ya en una nueva colección y ahora mismo quien nos asegura que en 2022 habrá feria”, sentencia esta diseñadora, una más de todo el engranaje que mueve ese mecanismo ahora parado que es la Feria de Abril y que necesita cuanto antes que comience a funcionar para que no desaparezca.